martes, enero 23, 2007

El laberinto del cine mexicano

Me parece muy bien que cuatro connacionales aparezcan en las listas de la Academia de Cine de Estados Unidos compitiendo por algún galardón. De los tres filmes sólo he visto El laberinto del fauno, de Del Toro, la cual me ha gustado mucho a pesar de abordar un tema que siempre me ha causado repulsión (la fantasía, las hadas y esas cosas). Sigo creyendo que González (¿por qué le dirán "Iñárritu" si su primer apellido es el muy simple y normal "González"?, algo que me recuerda cuando a López Obrador nada más le decían "López"... en fin) está sobrevaluado pero, bueno, para no ser prejuicioso esperaré a ver Babel para opinar. La tercerca, Los niños del hombre (creo que así se llama) me despierta más interés, sobre todo por actores como el británico Owen.

Pero, ¿por qué digo que está bien que estos mexicanos estén en la palestra? Pues porque esto representa, de alguna manera u otra, una inyección de ánimo para los que habitamos este país. Si no pasamos del cuarto partido en los mundiales, si la Guevara ya no baja de los 50 segundos y si desde Mario Molina ya no ha habido otro Nobel, pues se agradece que estos señores personifiquen esa legítima aspiración del pueblo mesoamericano encerrada en la frase de "poner en alto el nombre de México".

Y aquí no me vengan los culturetes con que González y Cuarón son comerciales y que hay mil y un realizadores subterráneos mejor que ellos, o bien, que se trata de los Óscares, es decir de un premio otorgado no tanto por la calidad de la película, sino por los compromisos comerciales y las amistades que puedan tenerse en el "ambiente" norteamericano. Si están ahí es por algo. Y, bueno, hasta para contar con buenas relaciones públicas se necesita cierto talento.

Entonces, digo que es una especie de renovación sanguínea tener a una camada de cineastas con prestigio en el planeta (ya era bastante cansado tener sólo a los Ripstein, los Jaime Humbertos Hermosillos y a los Fons en las carteleras). Es decir, que los egresados del CCC serán muy buenos y todo, pero que a veces no todo es triunfar rotundamente en el sala de la casa de algún artista alternativo afincado en la Escandón o poner el guión que revolucionará al cine nacional debajo de los envases de cerveza que se apilan en las mesas del Centenario.

En fin. Opino como un simple espectador, no soy experto ni mucho menos. Del Toro me parece un tipo muy inteligente y --quizás-- cercano a eso que suelen llamar inteligencia superior. Los otros, de acuerdo, son más terrenales, pero repito, hasta para tener conectes se requiere una cierta dosis de gracia.

Pero, basta de cine, que esto ya parece un blog de esos que bien pueden encontrar escribiendo las palabras "arte", "alternativo", "culturoso" y "blogspot" en la barra de búsqueda del gúgl.

La suerte está echada.

Mañana a la toma de Toluca.