Así es, en efecto. Al morir, todos somos un cúmulo de virtudes, probables candidatos al Nobel de los pro-hombres y depositarios de la fe del pueblo mexica...
Le ha pasado a Cachirulo, le ha pasado a Colosio, le ha pasado a Raúl Vale, le ha ocurrido hasta al mismísimo Díaz Ordaz. Ahora le toca el turno a José Francisco Ruiz Massieu, guerrerense, autor de algunos libros y priísta del viejo cuño asesinado en la calle Lafragua por un mercenario al que se le encasquilló el cuerno de chivo. Él también fue un philos-politikón, por lo que se ve. Ya dependerá de cada quien juzgarlo por su obra y por su legado. Aquí dejamos constancia de algunos de sus aforismos que han sido recopilados por sus hijas. Aplíquense al gusto.
|
0 Comments:
Publicar un comentario
0 comentarios<< Home