jueves, diciembre 16, 2004

Hay algunas similitudes y diferencias entre el ministro del Interior mexicano y su hasta ayer homólogo británico:
  • En primer lugar al ministro británico le llamában el ministro de hierro, a diferencia del mexicano que le llaman mesero, de tantas mesas de negociación que ha puesto y levantado sin el menor resultado.
  • Hoy exhoneraron a nuestro ministro de interiores de una acusación que pudo haber derivado en delito electoral. David Blunkett(que así se llama el exministro), no tuvo suerte y fue acusado de violar el código de ética de su gobierno al acelerar la visa de la niñera de su examante con la que tenía un hijo (uf, parece culebrón).
  • Ambos eran serios aspirantes a suceder a su jefe. Ahora David está fuera de la jugada.
  • El exministro es invidente de nacimiento, lo que no le impidió tener sus affaires y además estar al tanto de los asuntos del interior, policía y migración de su país, tanto es así que se pasó la mano y promoció una ley que permite detener arbitraria e indefinidamente a extranjeros que sean sospechosos de terrorismo.
  • Nuestro ministro del interior está enterito, pero hay muchas cosas que no quiere ver, por cierto, del asunto de Tlahuac ¿quien creen que se hizo chiquito y ni han hablado de él? ¿que no tiene bajo su mando al CISEN? ¿no vieron ni oyeron nada? Aunque escindieron de su ministerio el grueso de la función policial, aún le queda alguna, hasta que entre en vigor la nueva ley de seguridad nacional.

Y bueno aquí les dejo la historia de un ministro enamorado:

LONDRES.- Hasta hace unos meses, David Blunkett parecía un hombre dedicado por entero a su carrera política, más que a su vida sentimental, hasta el punto de que algunas personas de su círculo llegaron a decir que estaba casado con el trabajo.Conocido por su ceguera de nacimiento, su perro lazarillo y su peculiar acento del norte de Inglaterra, el dimisionario, de 57 años, llegó al Gobierno en 1997, cuando el Partido Laborista de Tony Blair ganó las elecciones.Fue entonces cuando el Premier nombró a Blunkett titular de Educación. Sin embargo, no alcanzó relevancia pública hasta el 2001, cuando Blair consiguió un segundo mandato y lo designó Ministro del Interior, donde se ganó su fama de "hombre de hierro".Tras los atentados del 11 de septiembre del 2001, Blunkett introdujo una ley antiterrorista que permite la detención indefinida, sin acusación formal o juicio, de extranjeros presuntamente vinculados a grupos terroristas. También demostró mano dura en políticas de inmigración y lucha contra la delincuencia. Fuente: EFE