viernes, abril 08, 2005

Polaroids del 07-A

  • En pocas --escasísimas-- ocasiones se puede ver a la gente tan interesada en temas de política y asuntos públicos. Ayer, a la hora de la comida los bares, los restaurantes establecidos, los ambulantes, las vulcanizadoras, las casas habitación, las oficinas públicas y privadas, en fin, todo el inmenso catálogo de la población nacional (casi casi como el que aparece en esa publicidad chafita de la asociación México en Paz, cualquier cosa que represente tal nombre) estaba pendiente del proceso de pérdida de protección constitucional de AMLO. El Canal del Congreso, aburrido y gris como si fuese la televisión soviética de la década de 1970, se convirtió, radicalmente, en el centro de todas las miradas y compitió ferozmente por la audiencia (o rating) con Fox Sports o con el vídeo de la Srita. Hilton que dan actualmente en el PPE de Cablevisión. Ante esto, la conclusión es que el 07-A 05 el Canal del Congreso se metamorfoseó en el Fox Politics nacional.

  • La diputada Bernal Ladrón de Guevara parece todo menos perredista. La verdad. Para qué recurrir a un discurso políticamente correcto frente a una obviedad. Ella es todo menos el clásico perredista, es decir no es fea, es inteligente, se viste bien y cae mejor. Ayer en el Pleno del Congreso de los Diputados nos dio una lección de defensa jurídica, de argumentación y, sobre todo, de agallas. Ahí, de pie frente a las hordas priístas y panistas, su estatura intelectual y moral se elevó como la espuma. De hecho, hasta tiempo se dio para contestar a una goajaqueña priísta, visiblemente fea, que preguntó alguna perogrullada con ese tono de voz que hacen los que dicen fíjate m'antaaaa como La Chupitos. Atención partido socialista mexicano: ahí tienen a un activo político de gran valor. Por favor, no lo vaya a desperdiciar.

  • Federico Döring. ¿Qué se puede decir de este "representante popular"? Sólo la vieja sentencia de que el que a yerro mata, a yerro muere. Tómalo en cuenta.

  • Un punto que sí deberían cuidar más los perredistas es la agencia de publicidad a la que mandan a hacer sus pedidos de camisetas, afiches y demás propaganda. ¡Por Dios!, ¡un poco de estilo, por favor! Es decir, no echen por la borda algo que bien podría ayudarles en su causa: sus jerseys, pulseras, cachuchas y demás artilugios propagandísticos eran todo menos una exaltación de la belleza y el buen gusto. Sólo unas camisetas negras que sacaron los senadores unos días antes con el fin de entonar el Himno Nacional podrían presumirse como algo digno de portarse. Por favor, un poco de cuidado en la mercadotecnia. Conozco mucha gente que ha dicho, bueno, me pondría algo a favor de AMLO si no fuera tan naca... También tómenlo en cuenta.

  • Ayer los mexicanos también me dieron una lección que no tenía que ver con política, pero sí con la fe y... el asombro. Al mirar las imágenes del Papamóvil circular por las calles de la ciudad rodeado de patrullas, helicópteros, gente y demás, pero VACÍO... no hizo sino asombrarme del carácter fetichista de la población mexica. Luego, para completar el cuadro, una silla (¡UNA SILLA!) venerada como si fuese la misma encarnación de SS Juan Pablo II. La verdad, sí sentí algo de miedo, así que mejor cambié el canal...

  • Los más felices de este lado del mundo deben ser los del diario nacional La Crónica de Hoy. Gócenlo chicos. No siempre se gana.

  • Al final de todo hay una certeza que queda en mi mente: gracias Dios por haberme permitido nacer en un país como México. Aquí, pase lo que pase, la diversión nunca termina. Por una o por otra causa. No importa que el espectáculo sea dantesco y sólo presagie nuestra tristísima condición de pueblo en vías del subdesarrollo. Como dicen por ahí, pobrecitos pero contentos.

  • La suerte está echada.