jueves, septiembre 28, 2006

Puebla FC

El Puebla FC regresa a la Primera División en diciembre. Hoy lo han anunciado algunos medios nacionales retomando las declaraciones del ejecutivo local, aunque en sus contrapartes estatales ya se había especulado con la noticia desde la semana pasada. Al parecer, el gobierno de Marín Torres, el hiperconocido góber precioso, ha apoyado a un grupo de empresarios de la entidad para comprar una franquicia de la Liga. Dicho equipo no sería otro que los Jaguares de Chiapas, a través de una relación comercial con el todavía gobernador Pablo Salazar Mendiguchía.

Bueno, no extraña que ésta sea la única manera en que el Puebla se mantenga o vuelva a Primera. Recordemos que este equipo ya ha descendido en dos ocasiones y sólo en una ha pisado los llanos de las divisiones inferiores. En la primera ocasión, luego de una pésima temporada aderezada con múltiples cambios de técnicos y contrataciones de extranjeros troncos, sólo se salvó por haber comprado a los recién ascendidos guanajuatenses de la Unión de Curtidores, equipo con un cierto toque mítico en el fútbol nacional. Así, se mantuvieron en Primera, pero con pésimos resultados. Tantos que volvieron a descender. Esta segunda ocasión ya no hubo tanto dinero --o al menos no quisieron soltarlo o no hubo nadie dispuesto a dejarse comprar-- por lo que ahora sí tuvieron que irse a Segunda (o Primera A, como le llaman eufemísticamente).

Como muchos otros equipos que descienden, pensaron que manteniendo cierta plantilla intacta y contratando algunos refuerzos volverían en un tris a la división alta. Bueno, pues tampoco. Ganaron el Apertura y quedaron últimos en el Clausura. Pero obtuvieron el derecho a jugar la final de ascenso, la misma para la cual hasta trajeron a Menotti desde su retiro en Argentina con el fin de dejar atado y bien atado --como diría el Generalísimo Franco-- la subida al cielo en esos dos partidos al todo o nada. Pues tampoco. Con todo y sus altas dosis de filosofía futbolística que les dio El Flaco, no pudieron con los Gallos Blancos de Querétaro (menos con ese contundente tres a cero que les propinaron en La Corregidora).

De esta forma, una vez más, Puebla FC se descubrió a sí mismo como lo que es: un equipo de divisiones inferiores, a pesar de que la publicidad de la VW siempre haya afirmado que, para los poblanos y para los alemanes que viven en Puebla, La Franja siempre será un equipo de primera. Y no lo digo en referencia a la ciudad. Recordemos que mientras los blanquiazules se enlodaban sus jerseys llenos de publicidad de chiles La Morena y Zapaterías Tres Hermanos en los campos llaneros de Salamanca o de la UPAEP, los Tigres Angelopolitanos se coronaban campeones de la Liga Mexicana de Béisbol.

Ahora, en este año del Señor 2006, el dinero será nuevamente lo que cuente en ese estado. Money talks, dice AC/DC. Sólo así pueden tener un lugar. A través del dinero que puede hacer bailar a cualquier perro. Mucha gente estará contenta en Puebla porque volverán a darle un uso digno al Cuauhtémoc. Pero, hombre, al hacerlo están avalando los métodos antideportivos bajo los cuales este equipo suele mantenerse en los sitios privilegiados. Es decir, que si tú avalas que de esta forma juegue tu equipo en Primera, no tienes autoridad moral para reprocharle a Marín que actúe como suele hacerlo.

En fin. Lo siento también por la gente de Chiapas. Tanto follón que hicieron cuando decidieron atraer un equipo de fútbol: que si por qué un estado pobre iba a gastar tanto en comprar franquicia, uniformes y, sobre todo, invertir en la construcción de un estadio cuando a menos de 100 kilómetros los niños se mueren de diarrea.

¿Cómo llamaremos al Puebla en el Clausura 06? ¿Jaguares de Áfricam Safari Puebla? ¿Los camoteros frezapatistas? ¿Los ejecutivos preciosos?

Ya veremos.