¡¡¡GOYA, PUMAS, UNIVERSIDAD!!!
Sí, debemos confesarlo, estamos eufóricos, pero ¿por que la alegría? Pareciera uno más de los fanáticos del futbol, sí, pero hay algo más desde mi personal punto de vista:

Ayer fuí ya en la tarde al Estadio de C.U. y me encontré con grupos de auténticos estudiantes festejando la victoria, entonando goyas, la gente pasaba en sus carros pitando en señal de apoyo y con el puño en alto.

Hasta ahí todo normal, pero me dá la impresión de que nuestro pambol nacional se convirtió en una especie del mesoamericano juego de pelota, ambos equipos eran realmente opuestos, uno, el campeón, proviene de una institución popular, con presupuesto escaso, con códigos de ética bien definidos, comprometidos fundamentalmente en el honor y orgullo universitario.

El otro, un equipo populachero, vendido a un empresario con tintes déspotas y dictatoriales, con amplio presupuesto y con una doble moral que le permite ofender a sus contrincantes vencidos y beneficiarse de errores arbitrales sin el menor espíritu deportivo.

Es tiempo pues de festejar por la victoria obtenida en la arena que permita el nacimiento del 8º Sol.

P.D.
El burócrata mayor, ni tardo ni perezoso, ya se colgó esta mañana del éxito de nuestra oncena.