viernes, junio 20, 2008

Puro, total y absoluto fútbol

Hoy hemos sido testigos de un verdadero partido de fútbol de Eurocopa de Naciones. Croacia y Turquía se han batido en un gran duelo que, para no desentonar, ha concluido desde los once pasos después de un cierre de alarido.

Esto es lo que nos gusta ver a muchos aficionados: emociones a tope, batallas épicas, desenlaces inesperados, remontadas heroicas, nuevos baluartes nacionales en hombros y, ¿por qué no?, derrotados sobre el césped hechos pedazos y con lágrimas en los ojos.

Confieso que a mí Turquía me parece un invitado incómodo --e innecesario-- en la Eurocopa. ¿La razón? Ni siquiera son europeos. Pero el duelo que se han dado hoy contra los croatas me ha parecido muy rescatable. Además, ante un fútbol un tanto mezquino, como el que hemos observado en anteriores encuentros de la misma competición, pues siempre se agradece este subidón de emociones.

Además, no puedo dejar de comentarlo, Croacia eliminó a Inglaterra en el mismísimo campo sagrado de Wembley. Así que, bueno, su eliminación también se disfruta. Por lo demás, los turcos tampoco llegarán demasiado lejos: en su camino vienen los alemanes y ellos ya despacharán como se merecen estos habitantes del cercano oriente...

Veo esto y una pregunta asalta mi alma llanera, ¿qué diéramos por esta zona del mundo, me refiero a la Concacafka, por ver partidos de este nivel? ¿Qué otra cosa podríamos pedir que un puro, total y absoluto fútbol?

Aquí a lo más que llegamos es a un deslucido dos cero de México sobre, sobre, sobre..., ¿contra quién coños jugó México hace unos días?