18-M

El viernes escribí este post que nunca llegó a publicarse. Bueno, nunca quiere decir hasta el lunes, porque hoy martes lo subo con la intención de llenar de más cosas burocráticas la supercarretera de la información (que en nuestro caso es más bien como terracería...).

Aquí va...



Las cosas no deberían ponerse así para ser un viernes previo a vacaciones (o puente, dependiendo de si eres estudiante y trabajador).

Después de haberse arrepentido a renunciar, mi jefa ahora ha vuelto a su idea original de irse a buscar nuevos ámbitos. Muy bien. Pero su indecisión ha viciado un poco el ambiente. Grillas internas minúsculas para el conjunto de la Administración Pública, pero grandes para nosotros. ¿Cómo quedaremos, con quién? En fin. Minucias, non-senses. El punto es que para nosotros sí son reales y poseen el carácter de aquí y ahora.

Aaaaah. Así pueden convertirse las relaciones en la burocracia. Es decir, deberíamos preocuparnos por obtener acuerdos, acceder a mejoras, impactar a la población. Pero no. Más bien se gastan las energías en saber si fulanito dijo tal, que si menganita le cae mal a Burundanga y así, ad inifinitum.

Pero, ¿y en qué lugar no suceden estas cuestiones quisquillosas? Es decir, alguna vez laboré en la iniciativa privada y era algo parecido. Fue ya hace tiempo y estoy seguro que todo ha evolucionado. Donde quiera que haya dos personas habrá conflicto. Siguiendo a Bolaño (el autor de Los detectives salvajes), no creo tanto en la humanidad porque es algo vivo y cualquier cosa viva no tiene remedio (quizás por eso él ya esté muerto).

Entre las indecisiones, los chismes, las prisas y la paranoia de este lugar, llegan los días santos, los mismos que según mi compañero rocker unamita son producto del sacrificio de Cristo (es decir, su sacrificio no fue para reconciliarnos con Dios, sino para que los burócratas tuviéramos dos días de solaz en el primer semestre de cada año).

Veo que ahora que escribimos más casi nadie nos consulta. Ja. Espero --en verdad-- que haya lectores por allá afuera. Checo el contador y descubro que los que llegan a caer a esta página lo hacen buscando "lolitas calientes", "hoteles de Tlalpan", "señoras en minifalda", "clubes sw" y demás bonitas cuestiones relacionadas con las carnes frías y la cachondería. Bienvenidos también, claro.

Por cierto, una ex compañera que teníamos ha dado una vuelta por esta su antigua casa. Ahora, a diferencia del pasado inmediato, sólo nos ha dicho un "hasta luego" muy forzado para despedirse (bueno, de mí en concreto). Hace poco hasta llamadas especiales para pedirme tal o cual cosa hacía. Pero, ahora que ya no hay ese vínculo, pues, la cosa cambia. Lo cuento no para quejarme, sino para que tú, amable (s) lector (es) no hagas lo mismo cuando estés en una situación similar.

Para finalizar, hace poco llegó un correo electrónico a nuestra dirección en la que un colega desconocido nos pedía algo sobre el Retiro Voluntario 2005. Si ese mismo alguien lee este post le quiero decir que tengo un archivo en Acrobat que le puede servir pero que, dada mi impericia en los temas tecnológicos, no sé cómo coños subir al blog. Así que, si te interesa, mándame tu dirección y te lo forguardeo, ¿vale?

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