lunes, marzo 14, 2005

Hay gente que me pregunta, ¿cuánto tiempo más vas a estar en esa oficina? Mi respuesta ahora es no sé. Antes solía decir poco tiempo. Me gustaría decir estoy por salir.

Prudencia es lo que se necesita.

Sé que tarde o temprano sucederá. Por supuesto, desearía que fuera ya, pero esa acción debe rendir frutos, mañana, pasado o un día.

Ahora el punto está más cerca. El asunto radica en mantener los últimos momentos en un nivel controlable. No desfallecer ahora que la costa se ve como una rayita superpuesta en el horizonte.

Agallas y mesura, tal y como lo recomendara hace casi un siglo el alemán Max Weber.