martes, marzo 01, 2005

RIP

Ahora nos pondremos solemnes y haremos un recuento de los que se nos han adelantado en el camino. Y de dos formas, tanto los que entierran al burócrata que todos llevamos dentro como los que físicamente desaparecen de este mundo.
En el primer caso nos referimos a los compañeros que dejan esta trinchera para buscar nuevos horizontes de la vida, generalmente mantenemos algún tipo de contacto, alguna llamada, tal vez los dejamos en nuestra lista de destinatarios para mandarles fowards y ocasionalmente nos vemos en alguna comida o un evento en el que coincidamos, pero inefablemente se van diluyendo en el recuerdo. Es mi propio caso, cuando he dejado alguno de mis anteriores trabajos (tres) aún mantengo cierto lazo con dos o tres excompañeros con los que se pudo entablar una cierta amistad, pero de los demás poco recuerdo y creo me recordarán poco, es la corriente de la vida, camarón que se duerme... amanece empanizado.

El otro caso si es trágico (y nos ponemos necrológicos) el de los compañeros que dejan este mundo de sufrimiento, esos dejan una huella, pasan al dominio público: te acuerdas de sutanita... En este feudo nos hemos enterado recientemente de algunos trágicos decesos (lamentablemente dos fueron mis colaboradoras, ahora ya nadie quiere estar en mi área). Una se llamaba Cristina, era buena persona, un poco despistada pero le echaba ganitas, un día se desvaneció le hicieron estudios y le encontraron un tumor cerebral, se retiró por incapacidad y sólo fué cuestión de tiempo, el año pasado dejó este mundo. La otra se llamaba Blanca, era la bomba sexi, se le vinculaba real o imaginariamente con algunos funcionarios, tenía una hija y muchas preocupaciones. Se fué en el primer retiro voluntario, se casó con un excompañero (el inge) y ambos se fueron a vivir a oaxacalifornia lejos de las críticas; un día vino de visita y nos comentó que había tenido otra niña, quedó en que regresaría. También nos enteramos que el año pasado murió junto con su marido, la pregunta de todos fue qué pasaría con las niñas.

A propósito de estos trágicos decesos, me comentan quienes tienen más tiempo de prestar servicios en esta DG que hace años otra compañera murió trágicamente y se dió el caso de un filicida que arrojó por la ventana a sus hijas. Hechos que sólo alimentan el morvoso recuerdo.

Por cierto, respecto a la muerte de otro burócrata, los priístas de Colima se quejan de que tendrán que convocar a sus segundas elecciones extraordinarias por falta de cortesía política de los partidos (de oposición) nos hemos visto obligados nosotros y el pueblo de Colima a ir a una nueva elección extraordinaria.

Ahora resulta que cumplir con las reglas constitucionales es descortés y majadero, seguramente querían gusrdarle luto a su gober por seis años; ¿en su visita a ese estado el hombrecito les diría que nadie está por encima de la ley?