viernes, enero 27, 2006

Faltan 30 días

Hemos tenido muy descuidada esta trinchera burocrática. Hay que reconocerlo. Han habido algunos temas, pero no creo que sean de interés público. Me refiero, por ejemplo, al hecho de que una tarde me acerqué al sitio donde están las cafeteras y la señora que es como la milusos de esta Dirección me dijo, no, de esa no porque es café de La Habana (es decir, de la cafetería de Bucareli y Morelos) y es especial del Director. Ja. Mi respuesta sólo fue, ¿pues no que tenemos que ser como la vanguardia de la cultura democrática en el país? Será lo que sea, pero así son los usos y costumbres: de aquí sí y de acá no. En fin. Esperé a que pusiera otro café, imagino que más corrientito, para poder servirme y espabilarme por completo después de comer. En fin.

Otra cosa que habría sido un buen tema fue el del tal Raúl Salinas en Pumas. Me joden los medios cuando se instalan en la posición de asustadizos. Las semanas que pasaron fueron de un bombardeo terrible hacia la hinchada de la Universidad en el sentido de que eran muy violentos y de que al pobrecito Salinas lo traían azorado con sus amenazas. De acuerdo, el tipo es un trabajador más que merece seguridad, pero, la pregunta es, ¿pues qué esperaban? Es decir, Raulito no sólo viene del Amiérdica, el rival más odiado de los Pumas, sino que había declarado una y otra vez su dizque orgullo de haber pasado por las fuerzas básicas de este equipillo y, por ende, de su acendrada rivalidad con todo lo que fuese Azul y Oro. Pero, bueno, a final de cuentas no es su culpa, sino de los que dirigen el destino actual de Pumas. No sé en qué coños está pensando la directiva para cometer esos errores. Y digo errores porque lo son: no puede ser que en el mercado mexicano no haya otro jugador con las características del tal Salinas, sobre todo si se piensa en la cantera universitaria. ¿En verdad era tan indispensable traer a una gallina para ocupar un puesto dentro de Pumas? No lo creo. Entonces, ¿pues qué esperaban?, ¿recibimientos con goyas y cánticos de apoyo? ¿No se supone que algo que siempre destaca la directiva sobre los aficionados universitarios es que somos pensantes y que eso nos distingue de toda la pobrediabliza? Entonces, pues bajo esta lógica lo que se esperaba era, al menos, una serie de cuestionamientos sobre el hecho duro: la contratación de un jugador que había mostrado sistemáticamente su rechazo a Pumas. Como decía el promocional de alguna sopa instantánea: ¡no puede ser que de 100 millones de mexicanos no encontremos a 11 que jueguen bien al fútbol! Algo así se puede aplicar en el caso de Pumas: no puede ser que de X cantidad de jugadores transferibles se tenga que escoger a una gallina (ya ni hablemos de haber traído a cartuchos quemados como Pinheiro y Victorino, los cuales sólo han dado lástimas tanto en la Liga local como en el extranjero).

En fin.

También es motivo de unas líneas el asunto del tal Víctor González Torres, alias el Doctor Simi. Vaya tipo. Nefasto por donde quieras verle. Hace unos días estaba en un Sanborns y llegué a la sección de revistas. Como se supone que ahí todo mundo puede hojear lo que se le antoje sin que tenga marcación personal, tal y como sucede en librerías como El Parnaso, fui directamente hacia las revistas del corazón con el fin de observar a las típicas artistillas nahuatlacas que, aunque salgan con medio pezón de fuera, siempre dicen: quiero que se me reconozca por mi talento y no por ser un símbolo sexual. Buen chiste. Dejando de lado este signo de la oligofrenia charrita, el punto es que mientras iba de un chisme a otro encontré una verdadera joya: un desplegado del tal Simi que a la letra decía:

"A los comunicadores y personas que se han burlado de mi manera de hablar, les recuerdo que tener una capacidad limitada y estarla superando es motivo de orgullo y no de vergüenza. Atentamente, Víctor González Torres. Presidente de Farmacias Similares y Representante Ejecutivo del Poder Ciudadano".

¿Qué tal?

Es decir, vayamos por partes.

Primero, este mensaje es como del tipo ay sí, tú las traes. Me recordó expresiones como "tú primero y yo nunca", "soy espejo y me reflejo", "botellita de jerez, todo lo que me digas será al revés" y otras del corte escolar-ñoño. "Tener una capacidad limitada y estarla superando es motivo de orgullo y no de vergüenza". O sea, ¿cómo? Para empezar, ¿cuál es esa tal "capacidad limitada"? ¿Se refiere a no poder hablar claro o a creerse el mesías que Mesoamérica esperaba? La verdad, no me queda claro. Creo que más bien se trata del segundo caso, por lo cual, pero ni de lejos parece estar mostrando avances. Luego, cuando dice "estarla superando", ¿implica que antes se le entendía menos de lo que ahora se logra descifrar?, ¿cómo podemos corroborar el "avance" que ha tenido el Sr. González en los últimos años?, ¿antes era sólo el "Enfermero Simi" o el "Camillero Simi" o el "Paramédico Simi", pero se ha superado tanto hasta llegar a obtener el grado de "Doctor Simi"?

Hay una frase que también llama poderosamente la atención. Después de que nos regaña, o bueno, regaña a los "comunicadores" y a las "personas que se han burlado de mi manera de hablar", pero como casi todo el mundo que conozco siempre tiene frases de sorna respecto al farmacéutico, entonces, pues no queda mas que ponernos el saco. Bueno, decía que después de que nos malviaja tirándonos netas malvibrosas, es notable la manera en que firma su mensaje. Veamos,

"Atentamente, Víctor González Torres. Presidente de Farmacias Similares y Representante Ejecutivo del Poder Ciudadano".

¿Qué tal?

Eso de que es el presidente de Farmacias Similares, pues sí, ni hablar. Él es el de la plata y es --imagino-- quien puede gritar y manotear respecto a lo que sucede dentro y fuera de sus estanquillos boticarios. Pero..., en concreto, ¿qué significa eso de que es el "Representante Ejecutivo del Poder Ciudadano"? Es decir, yo también soy ciudadano (según el artículo 73 de la Constitución) y el Dr. Simi NO es mi representante, mucho menos mi "representante ejecutivo". Y luego eso de PODER CIUDADANO. No sé, es como bastante fascista poner eso de PODER CIUDADANO. El Mexican Power, Todo el Poder al Pueblo. No, no, no. Está como muy confuso eso, ¿no? ¿Quiénes serán los representantes "no ejecutivos" del Poder Ciudadano? ¿La intelectual progresista Luz Elena González y la ex camarada del socialismo rumano Joana Benedeck? ¿Quizás la Sra. Aída Cuevas cuando entona esa frase que bien pudo haber sido extraída del Manifest der Kommunistischen Partei y que dice "porque ricos y pobres, todos somos similares..."? No, no, no. Repito en mi cabeza: "porque ricos y pobres, todos somos similares". ¡Tiembla Karl! Aquí está la versión del siglo XXI del viejo adagio que te aventaste hace unos años y que decía: a cada quien según sus necesidades, a cada cual según sus capacidades.

Pero, bueno, con eso de que el Dr. González Simi tiene la piel hipersensible y le da por andar demandando a diestra y siniestra a quien se atreva a decirle algo (recordemos al respecto las broncas con Joaquín López Dóriga y ahora con Patricia Mercado), bueno, pues mejor aquí le paramos. No vaya a ser que de Similandia en Peligro lleguemos a Burocratalandia en Peligro (¡¡¡!!!).

Confío en que el Tribunal Electoral detenga la amenaza que este señor pueda representar a la democracia mexicana. Digo, no tiene nada de malo que cualquier ciudadano quiera entrar en política, pero no por las vías que este señor ha mostrado preferir. En serio que con estos casos revaloro cuando Rubén Olivares, alias "El Púas", se lanzó para diputado, o bien, cuando Raymundo Capetillo y Francisco Javier (el mismo que cantó rolas fundamentales para formar la educación sentimental de la juventud cotorrona de los ochenta como ¿Qué es la libertad? o Que te amo como nunca imaginé...) compitieron por sendos cargos de elección popular, aunque sólo para actualizar el significado de la palabra fracaso.

En fin. Así las cosas hasta ahora.

Vayamos en paz.