martes, junio 05, 2007

El encarguito

Luego de saber que Sheridan había publicado un nuevo libro me di a la tarea de investigar dónde estaba y cuánto costaba. En la página del Fondo de Cultura Económica (FCE, mis librerías favoritas por mucho) aparecía con el precio de 170 pesos. Llamé a la que me queda más cerca --la Juan José Arreola-- pero me dijeron que no lo tenían en existencia. Mmmm. No tuve más remedio que llamar al número de atención a clientes de Gandhi (ya he hablado en este mismo sitio de lo ridículo que me resulta este nombre para una librería y, sobre todo, de una librería ¡mexicana!). Ahí, un tipo como todo sonrisas y atenciones (es un decir porque jamás le vi la cara por obvias razones) me dijo, sí, cómo no, lo tenemos en Gandhi Satélite, Madero y tal y tal. Perfecto, apártemelo en la de Madero. Sí, cómo no y tal y tal. Me dio mi clave y sanseacabó.
 
Después de la oficina me dirigí a dicha librería. Es una semi-nueva que está casi a la mitad de la calle Madero, en pleno Centro Histórico. No es una sucursal muy grande, pero tiene cierto encanto, aunque siendo estrictos todas las Gandhis son --en escencia-- la misma cosa. Aquí el aliciente es que poca culturosidad se da cita entre sus pasillos porque siguen pensando que es más fashion asistir a las del sur que a las del primer cuadro de la ciudad (esta frase de "primer cuadro de la ciudad" salió bastante lugar común, pero ni modo...).
 
Entonces llegué, busqué a un mozo y le di mi clave. Con un ánimo que bien podría llamarse de oso hormiguero, me condujo a una sección como apartada en la que están los libros que ya la gente ha solicitado con anterioridad y, acto seguido, me dio una tarjetita rosa con el fin de que le toque su comisión al momento de la repartición del botín.
 
Antes de salir me di varias vueltas y encontré algunas cosas interesantes (siempre que estoy en una librería o en una discoteca me reprocho el ser un pobre burócrata pobre). En el sonido ambiental había una especie de blues que hacía que la gente se sintiera sexy o, al menos, interesante entre libros, camisetas, discos y jeans. Luego de pagar con mi tarjeta de nómina le di las gracias a la moza y salí a la calle.
 
¿Qué puedo decir del libro en cuestión? De entrada, que es una edición bastante horripilante. No conocía a la Editorial Trilce, pero me parece que es uruguaya. Luego, como coeditora aparece la Universidad de las Américas-Puebla (la misma de los affaires Palou, La Catarina y los profesores despedidos recientemente). En la portada aparece un dibujo de Jis sobre un color rosa bastante contrastante con el estilo del autor. Pero, bueno, así salió el libro y ni modo. Lo que importa serán los textos, aunque hojeando un poco el mismo me he dado cuenta de que varias de esas crónicas ya las he leído en algún otro lado (sobre todo en Letras Libres y en Reforma).
 
En fin.
 
Más comentarios después.