miércoles, mayo 07, 2008

Love

Escucho el último disco de Zoé, el que grabaron en vivo en el Palacio de los Deportes de la Ciudad de México en noviembre del año pasado (de ahí el título de esta publicación).

Siguiendo con esta especie de comparación entre lo que tenía allá en el Ministerio y lo que tengo aquí en la Universidad, una de las cosas que sí me atrofian es que por acá no hay cajeros automáticos ni Starbucks cercanos. Suena bastante mamón esto, lo sé. Pero es verdad. Hay que trasladarse hasta Insurgentes o hasta Perisur para encontrar un ATM. Lo mismo sucede con el café: se requiere caminar varias cuadras para llegar a surtirse del vital líquido.

En contraste, el sur es mucho más fashion que el Centro. Si allá por una guapa que veías caminar por la calle había 35 feas, aquí la proporción baja a una guapa por cada 12 normales. De hecho, estoy sorprendido por la cantidad de buen material que tiene la Ciudad de México en términos de belleza femenina. Algo que se agradece siempre.

Y hablando de verdaderas mamis, Scarlett Johanson, la mujer más guapa que hay parada sobre esta superficie terrestre... se casa. Nada es para siempre. Ya se divorciará.

En otro asunto, el Real Madrid ha hecho pedazos al Barcelona hace apenas unos minutos. El sueño de cualquier blanco: ser campeones contundentes, que tu archirrival te haga el paseíllo y, además, que salga vapuleado de tu campo. La verdad, qué bueno que estos azulgrana hayan colapsado. Antes era como fan de los culés. Sin embargo, de un tiempo a la fecha me joden. No me gusta que traigan UNESCO como publicidad ni que anden por el mundo en misiones humanitarias (además, sin el quórum de jugadores importantes). Eso de lo políticamente correcto va mal con los verdaderos clubes de fútbol.

Ahora, que jueguen ahí dos mexicanos (bueno, uno y medio, ya que Giovanni es como más de San Pablo y menos de San Pedro Garza García) tampoco me hace tocarme el corazón para congratularme con este fin de ciclo blaugrana. Al menos allá esta especie de fracasos sí representan sacudidas importantes y movimientos telúricos hasta los cimientos. Lo contrario ocurre en esta su casa, México, donde --por ejemplo-- si Pumas no clasifica y no juega bien y no pasa nada, bueno, pues en efecto, no pasa nada, al contrario, hasta le renuevan el contrato al técnico y anuncian que para el siguiente torneo no se reforzarán... Vaya, vaya, vaya. Si fuésemos como los catalanes ya estaríamos pidiendo la cabeza del brasilero y de sus paisanos suramericanos en el equipo.

En fin.

Reflexiones de un miércoles por la tarde desde el sur mientras el vocalista afirma que no lo destruyamos más...