viernes, marzo 19, 2004

¿Obesos nosotros?

Como afirmamos líneas abajo, el aumento del funcionariado público puede tener la lectura de que el Estado está garantizando los derechos civiles e individuales de la población, claro, a través de su administración pública.

Quizás ineficientes muchas de sus áreas, sí. Pero hay gobiernos en países con democracias consolidadas que poseen la misma (o mayor) estructura administrativa que México.

No se vayan con el discurso simplista, de blanco y negro, de sentido común, que dice que el Estado contemporáneo es obeso y, por lo tanto, todo debe privatizarse o desregularse.

No somos clientes. Somos ciudadanos. No somos burócratas (en el sentido pe
yorativo del término). Somos servidores públicos.