Es cierto, el ministro Creel propuso a "su antecesor" Jesús Reyes Heroles para ser incluido en la Rotonda de las Personas Ilustres. La pregunta obligada es: si el mencionado no representaba los valores democráticos que ahora existen por doquier, ¿por qué se propuso para ingresar al cementerio en donde se rinde homenaje a los mexicanos grandes? La respuesta sería: sólo para quedar bien con los partidos políticos (Reyes Heroles del PRI, Gómez Morin del PAN y Castillo Martínez del PRD). Tan noble fin no tuvo el final deseado: la supuesta ceremonia de ingreso simultánea de los Tres Ilustres de Nuestro Tiempo se pospuso indefinidamente por una pequeña rabieta del autodenominado "Comité del 68", compuesto, entre otros, por un tipo que se apellida González de Alba. De hecho, ya casi todo estaba listo. Hasta un Seminario relativo al tema se realizó en San Ildefonso. A la fecha sólo han sido inhumados los restos de Heberto Castillo y Manuel Gómez, en sus respectivas fechas conmemorativas. La familia Reyes Heroles se opuso ante la ineficacia de la actual administración para demostrar que el ex líder del PRI y ex ministro del Interior no había sido participante directo de la llamada "guerra sucia" de la década de 1970. Ni siquiera a los muertos ha podido poner de acuerdo el actual ministro Creel.