miércoles, febrero 16, 2005

La moda cotorrona

Desde hace ya un tiempo considerable puede notarse la existencia de una moda cotorrona al vestir por doquier: la de portar camisetas negras que contienen alguna leyenda ingeniosa o llamativa en la zona del pecho.

Al parecer quienes comenzaron esto fueron los de Molotov luego de sacar su DDD. Así, el Tito o el Gringo Loco impusieron esta bonita costumbre de rotular en la ropa frases como Los Bitles, Amo el ruido y el smog, Perro del Mal y otras que hicieron las delicias del personal rockero en primera instancia, pero que, dado su nivel de aceptación, poco a poco traspasó las clases sociales para instalarse como una práctica socorrida entre toda la pobrediabliza. Algo que bien puede darle a esta actividad un carácter áltamente democrático e incluyente (hasta podría escribirse un ensayo o una tesis al respecto).

La tendencia llamó la atención de los ambulantes --obvio-- quienes, en menos de lo que forja un gallo, se dispusieron a confeccionar los nuevos modelos para la chaviza cotorrona. Como ingenio es un factor de sobra en el Productor Interno Bruto, el resultado de dicho trabajo bien puede ser apreciado en la actualidad por las calles de esta y otras localidades. No es difícil hoy día observar verdaderos portentos de poesía y creatividad en los broncíneos cuerpos que componen lo que suele definirse como sociedad civil nacional.

Por su alta capacidad de impacto y proclividad a formar espacios de solaz, su blog de confianza, el Sexacional de Burócratas (versión Casados) tiene el honor de citar algunos ejemplos que hemos apreciado en los espacios públicos cercanos.

  • Mi novio no es celoso, pero sí te rompe la madre.
  • Todos los días amanezco bonita, pero hoy exageré.
  • Soy fácil y estoy borracha.
  • Pepe El Toro es inocente (y Gloria Trevi también).
  • Busco novia con coche (vochos absténganse).
  • Que se mueran las feas aunque me quede sola.
  • No soy gay, pero mi novio sí.
  • El de al lado es gay.
  • En caso de incendio mira atrás (en caso de incendio, pendejo).
  • La suerte de la fea a la bonita le vale madres.
  • No soy bonita, pero estoy de moda.
  • ¿Qué me ves, güey?


Y así, ad inifinitum, pululan por las calles estas bonitas frases que nos dan fe del puntual espíritu ladillesco nacional.

Ante la brevedad de nuestra recopilación, recurrimos a nuestros lectores para cuestionar si alguien tiene más frases o recuerda otras que ha visto para que, por favor, nos ayude a complementar esta lista enviándolas al correo de este blog: sexacionaldeburocratas@hotmail.com

Por lo pronto, nosotros, Los Burócratas del Ritmo, propondríamos algunas referentes a nuestras actividades y hábitos, por ejemplo:

  • Soy burócrata y tú me pagas mi sueldo.
  • ¡Sea hombrecitos!
  • Yo no sigo las modas de otros.
  • Yo fui a la escuela de la Maestra Elba Esther.
  • Yo voté por Rincón Gallardo.
  • Yo era Puma antes de que fueran campeones.
  • Hago tandas.
  • Yo soy el del Sexacional de Burócratas.
  • Soy fan del Sexacional de Burócratas.
  • Sexacional de Burócratas ley.

Alabado sea.