Los burócratas están de fiesta

Después de la resaca estamos de vuelta, esperemos que nos quede algún lector después de tan prolongada ausencia. Como es de notarse todos los amigotes de esta oficina virtual, compañeros de chamba y demás agregados fuímos convidados al banquete de bodas.
No reseñaré cada detalle detalle de la misma porque de hecho no me acuerdo, pero baste mencionar que se cumplió con todo el protocolo: La comida fue excelente, hubo suficiente bebida, los novios abrieron la pista, se bailó la vibora de la mar, la novia aventó el ramo a las muchachas casderas, el novio le quitó el liguero a la novia y lo aventó a los aún solteros, el animador del grupo hizo bien su trabajo, los novios salieron rumbo al aeropuerto para enfilarse a su luna de miel y todos salimos como pudimos.

Después de dos días de ausencia injustificada acudimos al tercer día, en calidad de bulto, para evitar el despido y apenas ahora como que empezamos la semana, afortundamente mañana ya es viernes.

Pero no somos los únicos en festejar, precisamente el mismo fin de semana de la boda del año (por lo menos para este sexdebur) tomó posesión el nuevo gobernador de Puebla, pero la ceremonia de toma de protesta del ejecutivo estatal sólo sirvió de pretexto para unir a la élite priísta y empresarial en torno a su virtual candidato Roberto Madrazo, quien parecía quinceañera entrando por el pasillo central del recinto, repartiendo saludos y abrazos, el 2006 ya está aquí.

Y otro que parece que la resaca le pegó más fuerte que a nosotros es al gobernador saliente de Coahuila, resulta que hasta niño heroe se siente y ahora mandó poner en su estado unos espectaculares con su sacra efigie y tras de él un lábaro patrio. Como dice Katia D´Artigues, en su columna de ayer, a ver si a este sí lo sancionan por andar usando indebidamente los símbolos patrios o los panistas le tendrán mucho respeto a los priístas.