viernes, noviembre 25, 2005

Gracias

Agradezco de corazón a todos aquellos que me han dado su respaldo en estos días tan difíciles. Como algunos ya saben, mi madre falleció el sábado 19 de noviembre. Sin su apoyo todo habría sido más difícil.

Nos veremos pronto por aquí.

M.

martes, noviembre 22, 2005

Ubi Mors ibi spes

Mors est quies viatoris, finis est omnis laboris.

Fortis est ut mors dilecto

viernes, noviembre 18, 2005

Los tipos duros no bailan

Lo que anexo a continuación es lo que mañana debe aparecer en el diario donde colaboro, así que es algo así como una primicia de la Región 4. Asimismo, va un texto de Juan José Millás aparecido hoy en El País. Por cierto, hasta hace unos días descubrí que de nuevo puedes volver a leer las notas de ese diario de manera gratuita. Una buena noticia entre todo este mar de sinsabores.

PS. Leo el comentario de Paco y confirmo por qué es mi colega. Abrazo.



Agenda de riesgos 2006

Los tres principales partidos han definido sus candidatos a las presidenciales del próximo año. Sin demasiadas sorpresas tanto el PRD como el PRI han ratificado a los personajes que enfilaban con mayores probabilidades de lograr la nominación. En el primer caso, López Obrador sigue manteniendo los primeros sitios en intención de voto, mientras que en el PRI Madrazo Pintado ha dado una muestra más de que ese partido sigue siendo fiel a sus usos y costumbres más arraigados. La única sorpresa se ha presentado en el PAN, donde el candidato “oficial”, es decir Creel Miranda, fue echado por un emergente y en ascenso Calderón Hinojosa. Así las cosas, hoy tenemos a la terna de la cual surgirá el dirigente de este país hasta el año 2012.


Sin embargo, los comicios enfrentan diversos retos en el mediano y largo plazo más allá de las nominaciones partidistas. Por la importancia que tendrán en la legitimidad del mismo es conveniente hacer un repaso breve de ellas.

La Cámara de Diputados aprobó recientemente el Presupuesto de Egresos 2006. En este documento se ha establecido un recorte aproximado de mil millones de pesos al IFE (ocho por ciento de la propuesta original). Esto tendrá repercusiones tanto en la operatividad del Instituto como en la ejecución efectiva de algunos de sus programas, en especial el que se refiere al voto de los mexicanos en el extranjero y la asignación de prerrogativas a los partidos. Algunos han considerado a este hecho como la respuesta del PRI y el PAN a las sanciones que les fueron impuestas por el propio IFE debido a diversas irregularidades en la elección del año 2000.

Aunado a lo anterior, el tema del voto foráneo también ha generado controversias. Las expectativas depositadas en esta nueva modalidad de sufragio fueron muy altas al momento de su discusión y aprobación. El punto radica en que la respuesta al mismo ha sido muy baja. Hasta esta semana se habían recibido sólo mil 549 solicitudes para ejercer este derecho por parte de los mexicanos que viven en otros países (700 en Estados Unidos). Algo preocupante si se considera que se había mencionado un probable universo de 4.2 millones de votantes y que el IFE ha enviado 2 millones 52 mil formatos. El costo de cada voto postal (90 pesos) también ha generado comentarios en contra de este hecho.

Uno de los temas más populares y delicados respecto a los comicios del próximo año es el relativo a los dineros utilizados en la promoción de los aspirantes, tanto en las precampañas como en las campañas oficiales (a pesar de que no han iniciado formalmente). En la actualidad existen muchas especulaciones sobre el monto y origen de los recursos invertidos en estas actividades. Algunos medios han contratado empresas que se dedican a monitorear la publicidad aparecida en radio y televisión con el fin de recabar datos útiles para calcular el gasto total realizado. Los resultados han sido impactantes. Millones de pesos para aparecer unos segundos en cadena nacional. Estos informes han sido negados por los equipos partidistas bajo el argumento de recibir precios competitivos por parte de las empresas de comunicación. A nadie satisfacen estas explicaciones. La población cuestiona cada vez con mayor insistencia el exagerado costo que tienen las elecciones en México y, sobre todo, el desplazamiento que el dinero está haciendo de las ideas y los programas.

Durante la década pasada las elevadas cantidades invertidas en los comicios fueron justificadas bajo el argumento de que, al ser un tema emergente, su correcta realización requería no sólo recursos humanos confiables, sino un capital económico suficiente para abarcar todas las zonas del país. Asimismo, las prerrogativas otorgadas a los partidos se incrementaron con el fin de evitar que dinero ilegal o de dudosa procedencia fuese necesario, o bien, para garantizar que los partidos menores pudieran contratar espacios para dar a conocer sus propuestas. Sin embargo, los tiempos han cambiado. Ahora las dudas no se enfocan en el hecho de que la democracia cuesta, algo que todos hemos comprobado, sino en que se está privilegiando el gasto mediático como el principal ofrecimiento político.

Por último (a pesar de que existen más temas), el asunto del tono de las próximas campañas electorales. Si el dinero se ha instalado como el mandón de las mismas, estas se están inclinando hacia el lado de las descalificaciones y las amenazas de forma preocupante. Esto llama la atención porque casi todos los candidatos –si no es que todos—se han pronunciado por “elevar el debate” y “realizar propuestas”. En la práctica es todo lo opuesto. Lo que buscan es ganar votos desprestigiando a sus oponentes. El objetivo no es demostrar por qué se es mejor, quién tiene los mejores equipos o cómo comprobar una mayor experiencia administrativa. Al contrario. El punto radica en señalar los errores y defectos de los contrincantes para conducir al elector a un juego en el que el ideal no es el mejor, sino el menos malo.

Este aspecto deberá ser reconsiderado por los equipos de campaña, sobre todo a la luz de lo ocurrido la semana pasada con la presentación de dos nuevos videos que se sumaron a la larga lista de videoescándalos. A diferencia de lo ocurrido en marzo de 2004, cuando se dieron a conocer las primeras grabaciones de la –al parecer—inagotable videoteca Ahumada, el material presentado el viernes 11 de noviembre tuvo un auge efímero. A ello contribuyó el que no había pruebas contundentes en los videos que fincaran responsabilidades, pero también a que la gente se está comenzando a fastidiar de este tipo de artilugios. ¿Para qué me sirve ver a un tipo con una maleta llena de dinero si no pasa nada después? En opinión de un sector de la ciudadanía, la fórmula se ha desgastado porque no le resuelve sus problemas cotidianos. En contraste, inhibe la confianza hacia los políticos y los partidos, perjudicando a todo el conjunto y no sólo a los involucrados.

Las presidenciales de 2006 serán un ejercicio muy interesante. No sólo por lo cerrado que se ha tornado la competencia a dos meses de iniciar formalmente, sino porque gran parte de nuestro futuro como nación se definirá en la noche del seis de julio del próximo año.



Carta
Juan José Millás

Querido Dios: espero que al recibo de ésta te encuentres bien. Nosotros, mal, como siempre, ahora por un asunto que quizá te interese y que no es fácil resumir en dos palabras. Resulta que una parte de tus fieles pretende que el Estado financie los gastos inherentes a una asignatura de religión. Como son gente muy belicosa, se les dijo en su día que de acuerdo, que las escuelas ofrecerían obligatoriamente esta materia, aunque sería voluntaria para los alumnos. En principio, parecía una solución equitativa, justa, porque ninguna parte imponía su voluntad a la otra. Pero ahora se han descolgado con que a los que no estudien Religión se les penalice de algún modo, para evitar deserciones. No conciben otra forma de difundir tu existencia que a través del BOE, en forma de decreto.

Qué raro que al cabo de los tiempos Dios vuelva a ser lo de siempre: un decreto, un proyecto de ley, una ordenanza impuesta a gritos desde un púlpito radiofónico en el que todos los días se crucifica a alguien en cumplimiento, una vez más, de aquella regla según la cual el crucificado se convertirá en crucificador. Los obispos, que no habían salido nunca a la calle, se han manifestado ya dos veces en lo que va de año, una para exigir a los homosexuales que abracen el celibato, y otra para convertirte en un precepto. ¿Es razonable que individuos que no se movilizan por nada, estando el mundo hecho un cristo (con perdón), se comporten así?
Y muchos piensan que mejor no quejarse porque ahora sólo gritan. Hace poco mataban. De hecho, todavía circulan por ahí versiones de ti en las que apareces como un sanguinario que disfruta viendo inmolarse a los suyos mientras siembran restaurantes, plazas o mercados de cadáveres. ¿Pero cómo va a querer Dios eso?, les preguntas y ellos te aseguran que sí, que eso es lo que quiere Dios, eso y la asignatura de Religión obligatoria. Estas letras, querido Dios, son para pedirte que les envíes una señal de que las cosas no son así (como dice el refrán, cada uno en su casa y Dios en la de todos). Pero no quiero despedirme sin trasladarte un par de preguntas de mi hijo: ¿Por qué has puesto el sexo tan cerca del culo y por qué hay obispos castrenses? Muchas gracias.

jueves, noviembre 17, 2005

UNAM

Como para estropear nuestra corona de aparecer en la lista de las mejores 100 universidades del mundo, reaparecen los grupos porriles en nuestra universidad. Me choca además que sea precisamente en la prepa 6 donde se de el escenario de violencia, en primer lugar porque paso seguido por ahí y con el bloqueo de calles es imposible y en segundo término porque ahí estudié y en esos años no había esas cosas, es más, se caracterizaba por ser de las preparatorias más apáticas de la universidad y es comparativamente más pequeña.
Tal era el ambiente, que incluso un viejo amigo, que terminó siendo fósil en filosofía, convocó a la creación de un grupo que trató de organizarse (cuando puso sus carteles en los pasillos, pensé que nadie acudiría, me sorprendió que llenó un salón) con la idea de hacer grupos de contacto, inspirados en la idea de Eric From, según un libro que era la biblia para este amigo y que a mí, sinceramente me parecía que al maestro ya le patinaba cuando se vino a radicar a Cuernavaca.
También, un año antes, con otro amigo más naif, organizamos un grupo cultural, llevamos al auditorio un espectáculo chafa, una ópera rock de la época, y un concurso cómico deportivo (terminé dándoles a los ganadores una medalla de chocolate y una copa de papel estaño) luego mejoramos, se organizó un ralli y conseguimos el apoyo de grupo Radiomil, que nos donó discos y entradas a algún espectáculo, lamentablemente hasta ahí llegamos por las envidias generadas al interior del grupo. Todo terminó con la huelga del CGH contra Carpizo (cuya idea de subir unos pesos la cuota de inscripción algunos apoyamos y nunca creímos en Imanol Ordorica y compañía)
Así de ñoño era el ambiente, después de todo cuando se es jóven se es bastante estúpido y se puede ser. Por eso ahora me sorprende la aparición de estos grupos y que ahora esté clausurado ese plantel por alumnos y padres de familia (en mi época jamás le avisé a mi madre para que fuera a algúna vez a mi escuela).
No cabe duda que los tiempos cambian y efectivamente, la última vez que recuerdo un ambiente pesado en la prepa 6 fue en los años 70´s, yo iba a la primaria y una primas en esa prepa, recuerdo una pelea de porros a cadenazos y el aroma de pasto quemado.
Por eso empiezo apensar como Saramago, esos eran juegos de niños; y como la caricatura-editorial del Reforma, antes la cosa era más inocente, ahora nos preparamos a enfrentar una lucha de clases de a deveras. Entre otros muchos factores yo veo el fenómeno de las dos universidades, como veo el de los dos Méxicos, por una parte el exitoso, el que puede competir a cualquier nivel y por el otro el de los losers, el de los desarrapados, no sólo de bienes sino de conocimientos y que no tienen otro camino que el de la violencia, para obtener lo que quieren que es un minuto de fama y de poder y que no le importa su sociedad, porque no les da nada sino marginación, ahí se acaban los argumentos, no defienden un sistema que no les conviene, leyes que no les sirven, entonces el único camino es la autogestión y si es amafiada mejor.

Palabras de aliento

Desde que Salinas desprestigío la palabra solidaridad, parece que ésta ya carece de significado.
Sin embargo no es así, se agradece la actitud solidaria, incluso cuando uno no es el destinatario. Y a veces sentimos la necesidad de ser solidarios, sin caer en fantochadas ni falsos sentimentalismos.
Por eso en estos momentos le decimos al maese Weber que aguante, que saque la garra y que la vida va. No podemos decir que así es la vida ni que vale mil o le eche ganitas; tampoco podemos aconsejarle como sentirse ni qué hacer en tal o cual momento.
Lo único realmente sincero es recordar más o menos lo que hicimos cuando pasamos por lo mismo, cómo pasan los días como si fueran años y las semanas se nos van en un suspiro; como te vuelves especialista en términos médicos y hasta a la enfermera le das indicaciones de dosis y prescripciones. Y ves la calle y te das cuenta que la vida sigue pasando, que nadie se detiene a preguntarte si todo va bién, siguen con sus vidas felices y su trabajo rutinario.
Pero hay algo que te indica que hay que seguir, que vale la pena estar haciendo lo que haces y que tu enfermo (tu paciente) mejorará en cualquier momento, inevitablemente, con tus cuidados, para poder seguir la vida como era antes.
Una brazo Manolo y no se agüite.

miércoles, noviembre 16, 2005

En ocasiones quisiera que todo volviera a ser como hace un mes. Un poco de esa rutina común que harta, pero que hoy extraño. Ver el fútbol en la casa, leer el diario, despedirnos los domingos por la tarde.

Ante la enfermedad quedan algunas conclusiones. Aprovechar el tiempo. Trascender. Cuidarse.

Regreso a un antiguo post con una entrevista a Irvine Welsh: aguanta, que vendrá la buena racha.


Esperar.

Corazón espinao

Como buenos latinoamericanos que son, V. Fox y H. Chávez se han dado un entre de esos que quedan en qué, pus qué, pus qué de qué, pus como veas, qué qué qué, pus órale, éntrale, qué, ¡¡mmnnnaaaaaahh!! Es decir, mucho ruido y pocas nueces. Con esto no estoy diciendo que todos los remisos de las clases 1987 en adelante seamos llamados en estos días a nuestros respectivos cuarteles y zonas militares establecidas en las cartillas, con el fin de uniformarnos e invadir a ese país exportador de misses universo por el puerto de Maracaibo. La verdad, aunque el presidente municipal Fox no sea santo de nuestra devoción, sí da mala sensación de que primero ande tirando la piedra y luego, cuando vea que le ha salido un guapo engallado, bocón y gandalla, se acongoje y salga con la frasesita gay de "a otra cosa, mariposa", la cual deja en muy mal sitio a la histórica virilidad mexica. Mientras el tal Chávez sale con el folklorismo ese de que lo va a espinar si lo menea, nuestro Ejecutivo no tuvo otra respuesta mas que hacer alusión a la monarca que viaja desde Canadá hasta Michoacán. Algo así como decir "hola, crayola", "salín, balín", "oki doki" u otros recursos de la mexicanidad light y francamente arcaica. Ya nada más le faltó decirle "cámara, no te azotes, ñis".

Esto creo que también lo ha entendido la sección QRR de Milenio Diario en voz de Rafael Tonatiuh. El buen hombre ha dedicado --por esta razón-- un pedazo de su tiempo en pensar cómo responderle al ex militar convertido en trovador de la sabana, con el fin de que el orgullo tricolor no quede en deshonra, sobre todo si pensamos que en México eso de los duelos verbales es algo que tradicionalmente se nos da (al igual que el boxeo). Al respecto, recordemos esa vieja peli en blanco y negro en donde aparecen P. Infante y J. Negrete en intenso debate al son del huapango. Esos sí eran hombres y no pedazos, dirían las abuelas al comparar al Charro Cantor y al guanajuatense cocacolero. En fin.

Por su alto valor cívico y de neo símbolo patrio, aquí reproducimos estas coplas aparecidas hoy en la referida sección de ese diario. Si nos leen en Venezuela, avísenle a los del programa Aló Presidente que aquí también hay llanos, cerros y poetas que en el aire las componen.

Yo soy como tu papito
en la sabana y la OEA,
por mí responde hasta El Peje,
por ti, ni Miss Venezuela.

Yo soy el águila _mocha
que donde quiera se mete,
tápame el pico y los pies
y come y después vete.

Los populistas son peores
al hablar de mala gana
no mandes embajadores
mejor mándame una hermana.

No huelo tu aroma, espino,
ni te oigo ni te veo
no por dármelas de fino
sino porque estás requetefeo.

Ya lo dijo a voz en cuello
el bardo José Luis Borgues
eso que dijiste en verso
te lo repetiré a golpes.

En albures no compito
ni en México o Venezuela,
o le paras sanguijuela
o te acuso con Bushito.


Ya entrados en gastos, Presidencia de la República debería aliarse con la Federación Mexicana de Fútbol y convocar a un partido amistoso-belicoso entre las selecciones de ambos países con el fin de resarcir los daños. Los nuestros no son el portento en la cancha, pero los venezolanos están aún peor. Así que, por lo menos, llevamos las ganar en ese terreno. Cosa totalmente diferente si nos batiéramos sobre el diamante. Aunque, a decir verdad, ¿a quién le importa que ya no seamos amiguitos de ese país del Caribe? El problema es que con los desplantes de nuestro presidente no sólo es ese país (?) el que nos da la espalda. Ya traemos encima a Cuba y, en parte, a Argentina. ¿Quién seguirá? Lo peor de todo, según Fox defiende la posición de Estados Unidos y a la hora de la verdad estos nada más no lo respaldan como se esperaría.

martes, noviembre 15, 2005

The Italian Style

Esta semana están en México dos de las vacas sagradas contemporáneas en ciencias políticas. Ambos italianos. Giovanni Sartori viene a presentar su libro La Tierra Explota y el segundo, Michelangelo Bovero, no sé bien a qué, pero hoy por la mañana lo presentó Carmen Aristegui en su noticiario de radio.

Sartori (Florencia, 1924) es un clásico. Entiendo esto como aquellos autores a los que no todos han leído, pero que son referencia obligada al momento de demostrar que saben algo del tema que intentan abordar. Su nombre se ha convertido en una especie de marca registrada que lo mismo le sirve a una señora de Las Lomas que a un seudo-estudiante del CGH para dar sustento a sus argumentos. Su fama se ha consolidado a partir de su imagen de italiano de la tercera edad semi-bonachón, así como por ese libro pequeño y sustancioso que fue el Homo Vídens, La Sociedad Teledirigida, aparecido en 1998. Ese texto se convirtió en un best-seller planetario por el puntiagudo tema de la televisión y sus efectos que abordó, elevando al profesor universitario a niveles insospechados de popularidad más allá de las aulas. De esta forma, citar ahora a "Sartori" es como un sinónimo de que se sabe de ciencia política contemporánea, aunque tal vez no se conozcan sus textos anteriores, en especial La Política.

Hoy martes se presenta su trabajo en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional (qué extraño lugar, ¿no?), aunque no sé exactamente a qué hora. Si leen esto antes y están interesados, no duden en ir a escuchar a este hombre sabio, premio Príncipe de Asturias en Ciencias Sociales 2005 y académico de las universidades de Harvard y Columbia. Un buen aliciente para realizar esta actividad es decirles: si no leen a este tipo de autores terminarán como nuestro presidente municipal Fox, quien a la menor provocación abre la boca para expulsar cantidades ilimitades de heces (algo como lo que las madres les dicen a sus hijos de que si no comen vegetales terminarán chaparros y locos).


PS. La presentación del libro fue a las 11 horas. Olvídenlo. La desventaja de no poder publicar en directo desde el Ministerio.

lunes, noviembre 14, 2005

La rebelión de las masas

Hay que intentar volver un poco a la normalidad.

En Francia arden los coches. Hoy he visto un cartón muy bueno --creo que en Reforma-- donde el autor hace un paralelismo con lo que sucedía en 1968 y lo que ha pasado estas noches de otoño. En el primer caso el lema era "la imaginación al poder". En el segundo "la marginación al poder".

Mucha gente ha soltado un rollo de tolerancia y armonía que, en mi opinión, no tarda mucho en sostenerse. Es decir, desde aquí nuestros analistas dicen que el problema en los suburbios parisinos se debe a que los franceses no dejan integrarse a los migrantes de sus ex colonias (algo parecido a los norteamericanos como Huntington y nuestros paisanos). Un argumento simplista, en mi opinión. El punto --pienso-- no está en sólo abrirles las fronteras y darles asilo. A final de cuentas es cierto, los mozambiqueños, marroquíes, argelinos, turcos y demás están ahí porque alguna vez ellos, es decir los europeos, estuvieron allá. Sí. Pero eso no quiere decir que la gente no tenga derecho a defender lo suyo. Ya quisiera ver que nosotros estuviésemos en una situación similar. Claro que seríamos intolerantes con los extranjeros, con los extraños, con los foráneos. Me refiero a que quizás no con un alto grado de violencia los mexicanos reaccionaríamos de manera hostil con los visitantes, pero sí veríamos con reservas el que otros llegasen a nuestro sitio. Nosotros hablamos desde el otro lado de la situación: la de los países pobres que buscan mejores oportunidades. Pero, ¿y si fuésemos los ricos? ¿En serio seríamos tan buena onda para permitir que centroamericanos y sudamericanos vinieran a instalarse a nuestro país y, además, a exigir que se les diese empleo, seguridad social, vivienda y demás beneficios, en especial cuando dichos temas no han sido resueltos en grados razonables para los locales?

De hecho, escribo esto y pienso en las reacciones que he visto en mucha gente con la llegada de una oleada de argentinos a México en los últimos años. Al principio, todos deslumbrados y hospitalarios con estos. Claro, arremetieron con furia en empleos como el modelaje y la conducción. Pero, ¿después? Al menos mucha gente que conozco dice ya basta de argentinos en México. Y eso que no somos un país que se caracterice por recibir marejadas de migrantes con el fin de quedarse a vivir aquí. En México casi no hay negros, ni árabes, ni musulmanes. Pero, ¿qué importa? Con nuestros ejemplos sobra. Ahí están, como muestra, los problemas entre católicos y evangélicos tanto en Chiapas como en Hidalgo, también los incontables conflictos por fronteras territoriales entre n ciudades del país (por ejemplo, Puebla y Cholula). ¿Qué me dicen del trato que le dan a los provincianos en el DF y, claro, de estos en las ciudades de provincia? No me digan que un migrante cuando regresa a su terruño con súper camioneta y costumbres pochas no ejerce un cierto tipo de discriminación contra su gente, a la que ahora considera, digamos, atrasada e inferior.

Mi punto no es justificar la violencia ni de un lado ni de otro. Más bien estoy por decir que, en primera instancia, los problemas no vienen de las decisiones del gobierno francés o de los migrantes de los suburbios, sino de los gobiernos de esos países pobres que, enfrascados en la corrupción hasta la médula, no proveen las condiciones necesarias para que sus habitantes no tengan la necesidad de salir a exponer la vida en ambientes agrestes. Y eso incluye, pero por supuesto, al nuestro. Vivimos en un planeta global que lo que ha generado es un sentimiento radical sobre lo local.



(Re)leer a Ortega
ROGER JIMÉNEZ


La historia se repite con tediosa puntualidad. De la violencia que crepita en Francia parece que sólo nos interesa saber si está confinada al mapa galo o si nos despertaremos un día con los “bárbaros” en nuestro dormitorio. De nuevo acuden interpretaciones y análisis, unos menos afortunados y solventes que otros, sobre el efecto thermidor en el país vecino, cuando bastaba con releer (o leer, según cada caso) “La rebelión de las masas”, el profético libro que escribió Ortega y Gasset hace 75 años y que hoy resulta tan actual como entonces.

El capítulo titulado “Por qué las masas intervienen en todo y por qué sólo intervienen violentamente” es sorprendentemente esclarecedor del fenómeno y sus consecuencias en Europa, donde lo nuevo, afirma el filósofo y humanista, “es acabar con las discusiones, y se detesta toda forma de convivencia que por sí misma implique acatamiento de normas objetivas, desde la conversación hasta el Parlamento pasando por la ciencia. Esto quiere decir que se renuncia a la convivencia de cultura, que es una convivencia bajo normas, y se retrocede a una convivencia bárbara. Se suprimen todos los trámites normales y se va directamente a la imposición de lo que se desea. El hermetismo del alma (...) que empuja a la masa para que intervenga en toda la vida pública, la lleva también, inexorablemente, a un procedimiento único de intervención: la acción directa”.

En nuestro país no asistimos, hoy por hoy, a la combustión de coches en cadena, pero sí a una violencia verbal que nos otorga el sospechoso privilegio de vivir en el territorio con la mayor densidad de malhablados por kilómetro cuadrado en el mundo. Las grandes cuestiones merecedoras de debate se resuelven muchas veces con sonidos que van de los pulmones a la boca sin pasar por la mente. Existe, además, un pseudoperiodismo que escenifica polémicas artificiales para alentar el conflicto y la provocación. Las discusiones que escuchamos o leemos en ciertos medios tienen poco o nada que ver con la misión del periodismo de ilustrar al ciudadano y sí con dudosas causas ajenas al verdadero trabajo del periodista. De este modo, han convertido el insulto en un género literario. “Me gusta ser el único que habla –decía un dictador sudamericano-, me ahorra tiempo y discusiones.”

También Ortega se ocupó se este fenómeno tan nuestro con admirable precisión: “La escasez de la cultura intelectual española se manifiesta, no en que se sepa más o menos, sino en la habitual falta de cautela y cuidados para ajustarse a la verdad que suelen mostrar los que hablan y escriben. No, pues, en que se acierte o no –la verdad no está en nuestra mano-, sino en la falta de escrúpulo que lleva a no cumplir los requisitos elementales para acertar. Seguimos siendo el eterno cura de aldea que rebate triunfante al maniqueo sin haberse ocupado antes de averiguar lo que piensa el maniqueo”. Lo dicho, (re)leer a Ortega.

domingo, noviembre 13, 2005

Enfants de la patrie

Los hijos de la patria.

Son aquellos que sacrifican su interés personal o de grupo en aras de un futuro mejor para todos sus conciudadanos. Como cuando AMLO, FC y RMP se proponen a sí mismos como prohombres en torno a los cuales debemos aglutinarnos para llevarlos al poder y que desde ahí derrochen sus buenas obras a diestra y siniestra.

Sólo falta un pequeño detalle, ¿porque nos convencerán de ello? ¿que fin común perseguimos todos los mexicanos? (como diría el PND 2001-2006) ¿A donde queremos ir, como llegamos? y ahora ¿como nos regresamos? (esto último no lo dice el PND sino el maese Weber).

Parecen preguntas tontas y que redundan en pláticas de cantina. Pero ayer estaba viendo la repetición de la megareunión en el tetro blanquito (como dice Dehesa) en torno a una convocatoria disfrazada del gobierno en la televisora más poderosa de latinoamérica, los convidados, como ahora les llaman, personajes destacados y líderes de opinión, ahí estaban bajo un mismo techo, y a unos días de librarse de una órden de aprehensión de Hacienda, ahí estaba la gruesa figura del divo de Ciudad Juárez, como si nada y entonando una pseudocanción qué más parecía el decálogo de un borracho, queriendo decirnos porqué debemos amar a México.

Todo esto como parte de una campaña desde el pasado agosto de querere ensalsar el orgullo de la patria, para que no se nos olvide que un soldado en cada hijo le dió.

Aquí caben tres reflexiones breves, para no aburrir a nadie:

  1. Hace poco, Aristegui y Juan Villoro (cada uno en su columna) dío cuenta de un libro de Florescano, sobre la imágen de la patria. Ambos, se deshacían en elogios en la labor del historiador para ofrecernos litografías e íconos de la patria. He decir que yo conocí un anteproyecto de la mencionada obra, el investigador en comento se había acercado al ministerio donde laboraba para pedir apoyo económico para su publicación. Y me ufano de haber sido un factor para negar ese apoyo, me preguntaron y en lo particular me pareció una colección de litografías, con una breve explicación de su origen, pero que no contextualizaba, es decir era un buen trabajo de recopilación pero no de investigación. Al menos eso pienso, creo que los columnistas citados serán más sabios que yo para recomendar su lectura y deshacerse en elogios.
  2. Por el contrario, un libro que me parece imprescindible es el de un historiador estadounidense, (cuando tenga la bibliografía se las haré llegar) que después de un análisis de los acontecimientos del siglo XIX mexicano concluye que nuestra identidad nacional surge realmente después de la injusta guerra en la que perdimos la mitad de nuestro territorio (aquí sigo escuchando los lamentos del trauma que no hemos podido superar). Porque antes de eso, en la guerra de independencia ¿que iba a defender los indígenas y demás castas menospreciadas por criollos y españoles? ¿una patria que les garantizara ser explotados? Y en plena guerra con Estados Unidos, con el ejército enemigo a unos kilómetros de lacapital, todavía seguían las luchas en el congreso mexicano y las disputas entre conservadores y liberales, y la negativa de la iglesia de otorgar un empréstito para sufragar al ejército defensor. Es después de eso, y diría yo, después de la revolución cuando verdaderamente el pueblo se identifica con su patria, o su patria chica, como para defender su terruño y sus derechos.
  3. Después abundaremos, pero lo que está sucediendo en Francia ya inquieta a los que vieron el movimiento estudiantil de 1968 repetido en México. ahora creen que podría suceder lo mismo, ya Saramago decía que el 68 fué un juego de niños comparado con lo que pasa actualmente.

Y no están tan equivocados, es peor este grupo de jóvenes que no creen en nada, menos en un Estado que no les sirve, que los ilusos idealistas que creían poder cambiar al mundo.

miércoles, noviembre 09, 2005

The game its over

Va desde aquí nuestra solidaridad al maese Manolo, en estos momentos de presión.


Es cierto, uno va por la vida, como que dejando que nos sucedan las cosas, también es cierto que nos parece natural nacer, crecer, multiplicarnos y morir. Así podría describirse la vida humana, salvo casos excepcionales en los que en el camino uno inventa la electricidad o descubre una vacuna que salvará a la humanidad.

Pero nosostros, simples mortales, no hacemos más que vivir normalmente. El problema empieza cuando en ese lapso que implica vivir se nos ocurre sentir y pensar. La tragedia es una condición humana, no nos queda más que ser estoicos.

Diría Sartre: El oficio de ser hombre, decir sí o no en el momento exacto, de perseverar cuando no hay esperanza, de continuar cuando todo parece perdido.

lunes, noviembre 07, 2005

The suffering's going to come to everyone someday

Tener a un familiar enfermo y en cama es una de las situaciones más difíciles por las que puede atravesar alguien. Más si se trata de la madre. Desde que fue internada el sábado 29 de octubre hasta el día de hoy han pasado muchas cosas duras que sólo imaginaba, pero que no pensé --o al menos no esperaba-- afrontar. Estar en hospitales públicos y, sobre todo, en las salas de urgencias de estos es una experiencia extrema. Largas esperas, tomas de decisiones cruciales, observar en vivo y en directo el dolor y el sufrimiento humano, enfrentar la cuestión de la fragilidad de la existencia y ver lo que todos sabemos que pasa en esos sitios, pero que nadie desea tener enfrente.

Durante una de esas largas esperas en la madrugada escribí algo en mi cuaderno. Lo he releído y me parece que algunos pensarán que estoy trivilializando el asunto al publicarlo en este lugar. Nada de eso. Al contrario. Lo único que buscaba al momento de garabatear aquello era sacar algo de lo que inundaba mi cabeza. Todos tratamos de superar las adversidades con nuestras mejores herramientas. En mi caso eso fue lo que intenté. Además, aún en las peores experiencias se debe tratar de tomar lo positivo. Si no fuese así, la humanidad simplemente se habría estancado desde el inicio de los tiempos.

Por ello, aquí transcribo eso que escribí desde la sala de urgencias de un hospital público la madrugada del dos de noviembre de 2005.


Reflexiones desde la sala de urgencias de un hospital público en la madrugada del Día de Todos los Santos del año 2005 del Señor

a) Dada la dificultad que implica cuidar a un enfermo propio, es decir un familiar, un amigo muy cercano o hasta uno mismo, el trabajo de las enfermeras es, al mismo tiempo, plausible e irracional.

b) Estos días en este tipo de lugares me han recordado el título de uno de los cuentos del viejo Bukowski: vida y muerte en el pabellón de caridad.

c) Las frases populares siempre tienen vigencia y contundencia, a pesar de su simpleza o sinrazón. Pienso, por ejemplo, en eso de que en el Seguro Social no te curan una jodida gripa común, pero te salvan un órgano vital.

d) La sala de urgencias es una reproducción a escala de un hipotético mundo Playmóbil: unos hombres traen a gente enferma en camilla, los cuales serán atendidos y curados por enfermeras y doctores de bata blanca y chalecos verdes, mientras el público en general espera expectante atrás de la puerta de crital con varias expresiones básicas en sus rostros (angustia, miedo, alegría y esperanza).

e) ¿De dónde salen tantos enfermos?, pero, peor aún, ¿dónde reclutan a tantos doctores?

f) Una verdadera enfermera debe dejar ver, al menos una vez por semana, sus puntuales bragas blancas de rombo subterráneo a través de sus pantalones semi-transparentes.

g) Quien piense que el productor de agujas y mangueritas de plástico es alguien menor, no sabe lo que dice.

h) Dicen que en el hospital y en la cárcel se conoce a los verdaderos colegas. Ahora habrá que agregar a aquéllos que te envían mensajes de respaldo al móvil en esas mismas circunstancias.

i) Prefiero seguir viendo todo desde la Sala de Emergencia del Discovery.

j) Uno empieza a comprender la edad cuando uno de los colegas con los que bebiste varias veces es ahora el profesional que se encargará de alguna cosa importante en la vida, verbigracia, la salud del paciente de al lado.

k) Sabias palabras de José José, mejor conocido como El Príncipe de la Canción: "a los veinte uno se va a Las Vegas, wow, qué mujeres, qué diversión; a los cuarenta a Europa, qué cultura, qué museos; a los sesenta uno se va a Houston, qué hospitales, qué servicio..." (¿y a los treinta?).

l) Aunque suene cursi, la existencia sí que es un suspiro.

m) Hombre sabio también el que inventó la máquina lava "cómodos" y lava "riñones", artilugios ambos para depositar lo que todos secretamos y todos escondemos (entrar a los cuartos sépticos donde se depositan estas herramientas es como ingresar al séptimo círculo dantesco).

n) El tipo que está a nuestro costado está aquí porque el lunes comenzó a vomitar sangre por la nariz y por la boca. Su esposa, además, describe perfectamente que sus heces fecales ese día eran como "un zapote". El tipo aún tiembla de las manos y está recibiendo una transfusión sanguínea que pasa lenta, lenta a través de las mangueritas referidas en el inciso g. De acuerdo con el doctor, el hombre tiene aquí y ahora un total de sangre de siete, cuando lo normal es 10 o 12. Mi madre pensó que había tenido un accidente por el parche que tiene en la nariz. Ahora sabemos que no es un parche, que es una sonda que le está drenando los cuatro litros de tequila Jimador, 100 por ciento saber a gaver, que se bebió desde el fin de semana con sus colegas. "Es que me gusta mucho el tequila con limón y luego del tercer trago ya no me entra la comida", dice el bebedor punk, el cual no es la primera vez que está aquí por la misma razón. "Aquella ocasión (es decir, la primera) hasta una sonda por el pene le metieron", afirma su mujer, chaparrita, morena, mexicanísima madre de familia que se mortifica por el modo de beber de su cónyuge, pero que no falla si se le encomienda la bella y noble labor de ir a por una caguama, una botella de Bacardí, un pedazo de queso de puerco o unas salchichas botaneras para el aquelarre etílico. "¿Y por qué no se tomó un caldito?", pregunto yo que --digamos-- no soy un novato en el tema de la tragazón de alcohol, como dirían las abuelas. "Pues porque ya te dije que al tercer chupe ya no m'entra la comida". ¿Para qué más preguntas ante esta evidencia científica? "Una cubita, ¿no?", remato para recibir como sentencia un "nomás que salga...".

o) La historia del inciso n es real.

p) Ya sé qué negocio puedo montar cuando me jubile de la administración pública federal: abriré una tienda tipo miscelánea a un costado de un hospital. Con la sola venta de rollos de papel sanitario y botellas de agua recuperaré mi inversión en el muy corto plazo.

q) Quien haya visto la película Kids recordará al indigente negro que sube al metro de Nueva York y pide dinero mientras canta "I have no legs, I have no legs". Bueno, frente a mí tengo a la versión poblana del mismo.

r) Deberían los hospitales públicos abrir un departamento o área de atención dedicado a los familiares de los enfermos que montan guardia nocturna o de tiempo completo (como yo). Somos los que acabamos más dañados y no recibimos ningún cuidado. Auxilio.

s) Todos hemos fantaseado con la clásica enfermera sexy cuya bata blanca estrecha y ajustada apenas cubre unas ligas del mismo color. En este momento yo sólo busco de una enfermera un comprobante de estancia y una orden de salida que nos regrese a casa, aunque para elllo ni siquiera deje ver su pantaletota de paracaídas a través de su pantalón de papel cebolla.

t) Las enfermeras siguen patrones de edad marcados. Las hay, pongamos, de veinte, de treinta, de cincuenta. Oleadas de contemporáneas. Grupos genéricos fácilmente identificables. Todo se lo debemos a los programadores televisivos que repiten una y otra vez de manera cíclica Candy Candy.

u) En los hospitales públicos el proceso de aprendizaje de la sencillez es intenso. Si tú andas por la vida con aires de soberbia, al momento de ingresar a estos sitios tu condición puede cambiar. Guardias, trabajadoras sociales, enfermas y doctores, de hecho, hasta vendedores y taxistas te enseñan el significado del término humildad. Aquí ellos mandan. No importa que digan "haiga" o que lean el TV Notas mientras tú cargas bajo el brazo el ejemplar de noviembre de Letras Libres. Por supuesto, ese poder es producto efímero de su posición: ellos están dentro y controlan la situación. Tú, por el contrario, estás fuera, estás bajo su tutela y, además, estás subordinado. Si quieres obtener lo que quieres --más bien, lo que necesitas-- debes aprender a no querer imponer tu voluntad, sino a tener al final lo que buscabas. Es decir, debes dejar que una enfermera goce su poder dejándola hablar, regañarte y darte instrucciones para que al final obtengas el valioso pase de visita permanente que te permite entrar al piso donde está tu familiar hospitalizado. ¿Duro? Un poco. No importa. Como en todo --o casi todo-- de esta existencia, existe un eterno retorno. Ese guardia tiene familia. Esa familia tiene algún anciano. Ese anciano posee más defensas cada vez más débiles. Esa situación lo vuelve vulnerable ante las probables enfermedades que pululan en el medio ambiente. Ergo, es posible que algún día requiera atención médica y, entonces, la misma guardia con cuerpo masculino, uniforme café y botas negras esperará detrás de una puerta de cristal información sobre el estado de salud de su ser querido y buscará --claro-- entrar a verlo, hablar con el doctor, saber en dónde está. No es un mal deseo. Es simple y llanamente una de las leyes de la existencia: hoy aquí, mañana del otro lado.