jueves, noviembre 30, 2006

Réquiem por un sueño

Hoy termina la administración Fox. Vaya. Parece que anoche la gente estaba celebrando en El Ángel la victoria del guanajuatense y gritando ¡no nos falles! Hoy todo termina. La decadencia. Uno de los peores presidentes de la historia contemporánea del país. Su único mérito: sacar al PRI de Los Pinos. Ni más, ni menos.

Clonazepán y circo

Andrés Calamaro
Perdimos estabilidad
no sabemos de qué lado
vamos a quedar parados.
Se agotó lo natural
mentimos una vez más
no cantamos la verdad.
En nuestra vida real
siempre fuimos decadentes
tuvimos la libertad
apretada entre los dientes
alguien cantó no va más.
Con los párpados pegados
por un sueño postergado
nos cansamos de luchar.
Demasiada camiseta
y cada vez menos gambeta
la sonrisa cuesta más.
¿De qué país estoy hablando?
Las neuronas van marchando
mucho traje de fajina
pero sobra cocaína.
Y con el precio que tiene
éste lugar me conviene
gente fina, delincuente.
Algunos ya diputados
y brindo por nosotros
los tarados que les pagamos.
Antes pelo, ahora gente
antes lucha, ahora circo
antes pan, ahora clonazepán.
Pastillas, la última esperanza negra
podés pedirle pastillas a tu suegra.
No me digas la verdad, no me mientas
ya me dí cuenta que no es lo que era
de eso se dá cuenta cualquiera
antes o después de las rosas
ves a través de las cosas.
En nuestra vida real
siempre fuimos decadentes
tuvimos la libertad apretada entre los dientes
alguien cantó no va más
no va más.

miércoles, noviembre 29, 2006

Dale, oh. Dale, oh.

De entre todas las imágenes que se difundieron ayer en los medios, una me llamó particularmente la atención. Al momento en que el diputado greñudo del PRD intenta subir a la tribuna y queda --literalmente-- colgado, una diputada se zafa la marcación que le hacía una homóloga y comienza a aventarle con particular saña todo cuanto encuentra a la mano. Imagino que habrán sido vasos, latas de refresco o envases de agua.

Un día después sabemos que esta sui generis representante popular se llama Violeta Lagunes, es panista y, oh qué cosa, es de Puebla.



"Ora sí, pinche greñudo, ahí te va esto para que aprendas...".

"¡Muere, hijo de Marx...! Siente el rigor del capitalismo de la Coca...".

"Anda maldito, ahí te va Larry...".

San Lázaro, levántate y anda

Lo dicho, México ha pasado de la dictadura perfecta a ser la caricatura perfecta.

Lo del asesinato de Valentín Elizalde hijo, también conocido como El Gallo de Oro, me parece que es un fenómeno que se ha tardado en llegar. Es decir, en México los verdaderos grupos violentos no son los rockeros o los metaleros o los punketos, sino los norteños y los de bandas. ¿Por qué? Bueno, porque mientras los primeros cantan cosas como dos corazones laten dentro de mí (Fobia) o dime otra vez que me quieres y que no te irás (Allison), los segundos no se andan por las ramas y sus letras están salpicadas de cosas como que la avioneta despega en tantos metros, que las metralletas tartamudearon, que las camionetotas, que los cuernos de chivo, que la Mary, la Blanca y la Negra (entiéndase como mota, coca y heroína), y que si uno es más jefe de jefes que el otro.

Además, en los aviones los rockeros siempre van muy bien sentaditos, con sus esposas y no beben (pero eso sí, van diabólicamente vestidos de negro y con mil y un tatuajes), mientras que sus contrapartes norteñas suelen embriagarse y hacer escándalos aunque vayan de paisano.

Entonces, ¿cómo no esperar este tipo de actos violentos?

Las amenazas que se han cruzado los cárteles del narco en internet auguran una escalada de la violencia cuyos destinatarios serán los cantantes y grupos de música popular. Si hacemos caso a lo que ha aparecido en los medios, uno de los sentenciados son Los Tucanes de Tijuana. En fin.

De esta forma, si la intención es parecer rudo y creer que tu vida es interesante y emocionante, lo primero que debe hacerse es borrar del iPod todas las canciones de trance, rock, surf, ambient, rockabilly, garage, house, psycho, drum n' bass, metal, black metal, death metal, speed metal, thrash metal (y todos los metals habidos y por haber), electrónica, pop, electropop, alternativa, blues, bossa nova, electro bossa, dance, jazz, indie, lounge, new age, reggae, reggaetón, world beat y toda la pedantería musical existente, y después comprar en la piratería del mercado el mp3 de Las Puras Pinches Perronas de la Música Norteña.

¡Ajúa, raza!

martes, noviembre 28, 2006

01-D 06

En estos momentos los diputados federales se están dando unos tortazos por la tribuna de San Lázaro.

Lo dicho: no hay que ir a la FIL el próximo viernes para contar con momentos de solaz y adrenalina, la cita es en el Congreso de la Unión, domicilio conocido.

Y si no, al tiempo.

Voy a empezar a vivir porque tengo muy poco que decir.

Andrés Calamaro

Ministro del Interior habemus

Ramírez Acuña, el gobernador con licencia del estado de Jalisco, ex alcalde de Guadalajara, ex diputado del Congreso de esa entidad y ex concejal de Zapopan, será el próximo Ministro del Interior mexicano.

Muchos ya han levantado el grito de que se avecinan tiempos difíciles, de represión y mano dura. De hecho, aún antes de que se hiciera oficial el anuncio los partidos poíticos habían dado a conocer su inconformidad respecto al asunto.

Se dice que Ramírez es un político firme, pero con limitaciones. En general, existe una especie de comparación en blanco y negro sobre el próximo funcionario federal: o es totalmente negativo o destacan sus puntos positivos. Ya lo veremos hasta que comience a operar.

Sin duda, su principal acierto político fue haber destapado a Calderón al término de la reunión Latinoamérica-Europa de 2004. Vaya cosas.

El nombramiento que más me ha desconcertado ha sido el de Germán Martínez en Función Pública. Ahí sí hubiese sido mejor que repitiese Eduardo Romero. En fin, son los cobros de factura a los que se está enfrentando Felipe de Jesús.

lunes, noviembre 27, 2006

Anotación

"Avanzan los jotos".

Cabeza principal de un diario colgado en un puesto de periódicos de Reforma.

Aún hay más, coño

Después de unos días de ausencia he vuelto a la oficina. Todo está igual. Bueno, tampoco podía esperar grandes cambios cuando sólo me fui cuatro días de la semana pasada. En cualquier caso, la cosa ha ido tranquila, afortunadamente. El final del sexenio se ve, se siente. Ya estamos como en ese periodo de incertidumbre que tienen los transbordadores espaciales al momento de ingresar a la atmósfera terrestre desde el espacio exterior. Durante esos minutos en los que se pierde comunicación con la base lo único que queda es esperar: a que todo salga bien, a que lleguen con vida y a que la nave resista esos instantes cruciales. Bueno, pues más o menos así estamos los burócratas por estos días. En términos de la filósofa María Elena Velasco, también conocida como La India María, en estos momentos no somos ni de aquí ni de allá.

Por estos días también se ha inaugurado la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL). Como cada año, Darío nos ha invitado a su casa. Como cada año, creo que quedaremos mal. Por lo que veo, la FIL se ha convertido en algo así como el Cervantino de los libros, es decir en un acontecimiento al que hay que ir y en donde lo importante no son tanto los actos culturales --o culturosos-- que ahí se desarrollan, sino el hecho de echar desmadre. Esto último no está nada mal, de hecho, Guadalajara es una ciudad que se presta para dicha actividad lúdica: sus calles son muy bonitas, la escenografía invita a la perdición y, además, algunas cantinas del Centro Histórico tienen la sanísima costumbre de vender las chelas a 11 pesos, tal y como pude corroborar en una de la calle Juan Manuel (excelente nombre) allá por el año 2004. Digo, igual en estos momentos la chela ya subió a 12 o 13 pesos, pero aún así no deja de ser bastante considerado dicho precio con el personal. También está La Mutualista, pero ahí como que ya es para más onda culturosa.

Pero a lo que iba. Decía que la FIL ya es como el Cervantino porque el punto importante es ir. ¿A mirar libros, a comprar libros, a leer libros? No tanto. La cosa es estar ahí y hacer como que se es culturoso y tal y estar en el movimiento. Igual habla mi prejuicio en estos momentos, pero hasta no ver no creer.

La edición de este año es especial, no sólo porque se cumple su segunda década de existencia, sino porque uno de los platos fuertes será el recital gratuito que dará Sabina en la explanada de la Expo, la misma que se ve desde los amplios ventanales del Hilton cercano a la avenida Mariano Otero.

Para ser honestos, tengo muchas ganas de ir, sólo que los horarios y los tiempos que tenemos (y cuando digo "tenemos" no lo hago como aquellos a los que le dá pena hablar en primera persona, sino porque estoy incluyendo a mi esposa) nos han jugado difícil para este paso de noviembre a diciembre. En fin. Si no se puede, ya veremos qué hacemos para cerrar fuerte este año 2006 en términos de periplos.

Mientras tanto, si el espectáculo no lo dará la FIL, yo creo que nos apoltronaremos en la avenida Congreso de la Unión el próximo 1 de diciembre para ver de cerca los madrazos que seguramente se darán las fuerzas federales contra las fuerzas progresistas legítimas de este país. Si nos da un arranque de folklorismo revolucionario al estilo de Manu Chao, igual cogeremos el ADO rumbo a la Plaza de Santo Domingo en Goajaca, Goaj., para ver el segundo tiempo de ese mega pancho que armaron loS Appo'S versus los PFP's.

Siempre en Lunes.

domingo, noviembre 26, 2006

Súper domingo

Así le pusieron los de Televisa a su transmisión deportiva de hoy. "Súper domingo". Y luego todavía remataron con algo así como "liguilla de gigantes". En fin.

El listón negro virtual que montaron en la esquina superior derecha de las pantallas más bien se debió a Pumas y no al Sr. Velasco. El equipo Azul y Oro perdió de manera bastante rara frente al ranchuca. Lo dicho: no era el caballo negro. Pumas será campeón en uno o dos años más. Primero seguirá el Tuca la próxima temporada, hará por ahí de 26 o 28 puntos, nos salvará del descenso, clasificará a la siguiente liguilla y hasta ahí. Luego le darán las gracias y vendrá otro técnico. Éste hará algún tipo de esfuerzo importante con fuerzas básicas y, después de un proceso de maduración, los nuevos jugadores darán la cara y volveremos a ser campeones. Mientras tanto, sólo a esperar que las gallinas no lleguen a la final.

Digo, podríamos estar peor. Por ejemplo, como los equipos de Monterrey: mucho dinero, mucha alharaca, cero resultados. O como el Morelia. O como toda esa pipiolera --este término lo uso de mi madrina de confirmación-- personificada en los incoloros, insaboros e inodoros Tecos, San Luis, Querétaro, Santos, Atlante, et al.

La muerte de Raúl Velasco me ha dejado ese sabor de boca como cuando falleció Fidel Velázquez. Una parte del antiguo México se ha ido con él.

sábado, noviembre 25, 2006

Reintegración

Después de tomar los últimos días de mi primer periodo vacacional de 2006, el próximo lunes estaré de vuelta por la oficina. Como habrán podido notarlo, la semana que ha pasado me he dedicado al reconfortante ejercicio del solaz, es decir a no hacer nada. Bueno, no tanto porque se ha cumplido un año del fallecimiento de mi madre y hemos hecho las ceremonias correspondientes. Pero después, nada. Sin embargo, como ya se acerca esa hora cero para los burócratas personificada en el 1 de diciembre, día del cambio de gobierno sexenal, es conveniente estar al pie ya no sólo del cañón, sino de toda la artillería de las oficinas públicas en espera --y en vigía-- de lo que pueda acontecer a partir de ese momento para la vida laboral del funcionariado federal mexicano.

Así que, salud colegas, y disfrutemos los últimos días de certidumbre.

Por cierto, un tip para los Mexican Moleskiners: en la librería del FCE del Aeropuerto están más baratas las libretas-fetiche. El modelo de bolsillo está abajo de los 100 pesos y el grande a 139, mientras que en las demás FCE están en 110 y 164, respectivamente.

martes, noviembre 21, 2006

México cantinflea

Lluís Foix
La Vanguardia

Augusto Assia era un gallego fascinado por Inglaterra. Felipe Fernández Armesto, ese era su nombre, se divertía contando sus vivencias en el Londres de la guerra, las costumbres de las gentes del campo, los laberintos misteriosos de sus relaciones sociales.

Paseábamos un día por Fleet Street en uno de sus frecuentes viajes a la isla. Acababa de celebrarse una elección parcial y un diputado conservador ganó por una mayoría inesperadamente abultada. Yo escribí la crónica diciendo que el diputado en cuestión había arrasado en las urnas de no sé que distrito.

En democracia no se arrasa nunca, me matizó Assia. Se gana o se pierde. Aunque sólo sea por un voto. De hecho el primer ministro Callaghan perdió una moción de censura por un solo voto en 1979, se precipitaron las elecciones generales y llegó la señora Thatcher para quedarse por mucho tiempo.

He recordado esta conversación con Fernández Armesto, cubierto con sombrero y vistiendo lanas inglesas de calidad, al contemplar el espectáculo que se está produciendo en un país tan importante como México.

Si mis lectores mexicanos me lo permiten, me consta que son muchos, les diré que México cantinflea un poco. Mario Moreno Reyes, 'Cantinflas', fue un célebre comediante mexicano que destacó en el cine, en el teatro y también en su compromiso social participando en actividades sindicales.

Fue tal la penetración de sus parodias y de su sentido del humor en el mundo de habla hispánica que la Real Academia de la Lengua ha admitido el verbo cantinflear, entendido como alguien que habla y actúa de forma disparatada e incongruente sin decir nada.

Se me ocurrió que México cantinfleaba al ver cómo Andrés Manuel López Obrador, derrotado oficialmente en las urnas, se proclamaba presidente del país en una ceremonia aplaudida y contemplada por más de cien mil personas en el célebre Zócalo de la capital azteca.

Millones de mexicanos están al lado de López Obrador, que pretende formar un gobierno paralelo al considerarse víctima de un fraude electoral en los comicios de julio. Fue derrotado por Felipe Calderón del partido de Acción Nacional por un porcentaje que no llegaba a un punto.

La ceremonia inaugural del nuevo presidente tendrá lugar el primero de diciembre. Pero López Obrador se le ha adelantado jurando "proteger los derechos de los mexicanos y defender la soberanía y el patrimonio de México asegurando la felicidad y el bienestar del pueblo".

La situación es insólita y esperpéntica. México se dispone a tener un presidente oficial y otro que actuará en paralelo. López Obrador ha roto las reglas del juego. No estoy en condiciones de verificar la limpieza del recuento.

Pero si los tribunales han determinado que el nuevo presidente es Felipe Calderón, no entiendo cómo se puede proclamar un presidente alternativo por el simple hecho de que ha habido un pucherazo no probado en los escrutinios.

Al Gore perdió las elecciones de 2000 ante Bush después de un recuento que se prolongó más de un mes en el estado de Florida bajo la sombra de la falta de transparencia en el estado del que era gobernador el hermano del actual presidente. Y se dedicó a investigar las consecuencias del cambio climático y hoy es un personaje respetado en todo el mundo.

En un escenario más próximo, el de Catalunya, Artur Mas ha ganado las elecciones. Pero no cuenta con una mayoría suficiente para gobernar. Pasará a la oposición y no incitará a la insumisión civil de sus votantes.

La democracia tiene sus reglas. Y tanto los que pierden como los que ganan las tienen que aceptar. No se puede cantinflear en una cuestión de esta envergadura. México es un país demasiado importante en América para estas bromas.

lunes, noviembre 20, 2006

López Obrador amenaza a México

El País

El candidato fracasado a la presidencia de México, Andrés Manuel López Obrador, ha convocado para hoy a sus seguidores en la plaza del Zócalo de la capital mexicana para organizar una fantasmal farsa política en la que quiere proclamarse jefe de Estado legítimo con un Gabinete en la sombra. Tiene el propósito así de convertir en permanente, e incrementar incluso, su ya insoportable desafío a las instituciones legítimas del Estado democrático. Éstas confirmaron en su día la victoria del ya presidente electo Felipe Calderón, que habrá de jurar su cargo el próximo día 1 de diciembre. Salvo que a última hora el sentido común le conduzca a una muy poco probable enmienda, el candidato izquierdista del PRD que lidera el Frente Amplio de Progreso (PAD) va a cometer hoy el peor y más disparatado de los errores que, sin descanso, viene encadenando desde que perdió el pasado 2 de julio, y por muy estrecho margen, unas elecciones que creía ganadas.

Si algo ha logrado López Obrador con su permanente y escasa consideración con las instituciones democráticas del Estado y con sus decisiones es el oprobio de poner en peligro la convivencia pacífica y la paz civil en esa gran nación que es México. La movilización de cientos de miles de seguidores de las opciones de izquierda y de viejos aparatos clientelistas y antidemocráticos en favor de una aventura política antiinstitucional y antidemocrática pesará como una losa sobre las posibilidades de nuevos líderes de la izquierda para presentarse como alternativa al nuevo Gobierno con opciones políticas racionales.

López Obrador puede haberse visto inducido a actuar así por los aires de populismo revolucionario que en los últimos años se han abierto paso en la región y por el mal cálculo de considerar que si otros han conseguido beneficios de su explotación éste podría ser también su caso. Los llamamientos de Felipe Calderón y del aún presidente Vicente Fox para reconducir la situación por el bien de la armonía nacional sólo han tenido el insulto por respuesta. Que López Obrador y sus seguidores utilicen el aniversario de la Revolución Mexicana de 1920 para su mascarada no hace sino profundizar el agravio a las instituciones.

Pero la realidad es que tal encastillamiento no conduce a ningún lado si no es a la insignificancia política, que irremisiblemente irá llegando con la defección en sus propias filas. Nadie puede descartar que López Obrador y la izquierda que ha seguido su populismo cuasi suicida hagan aún más daño a la democracia mexicana con toda su conducta que culmina en el acto de hoy. Sí se puede descartar ya que el candidato derrotado, al negarse obstinadamente a aceptar el veredicto de las urnas y cortarse cada vez más a sí mismo las salidas para una retirada mínimamente digna, vaya ya jamás a ser un presidente legítimo y democrático de México. Ahora se trata de evitar que su fiasco personal lo acaben pagando la nación y las instituciones que parece querer secuestrar.

jueves, noviembre 16, 2006

¿Otro año prueba cero?

El Guardián, noviembre 11, 2006.


Mi generación recuerda con zozobra la transición de las administraciones Salinas y Zedillo. En aquellos años –1994 y 1995—el país experimentó diversos hechos que cimbraron de alguna manera el orden y las creencias arraigadas desde la instauración del régimen posrevolucionario. Tal y como tituló la revista Proceso en una de sus portadas de la época, a mediados de la década de 1990 se acabó el mito de la paz social.

La irrupción de un movimiento guerrillero en el estado de Chiapas, el asesinato de figuras políticas de primer nivel como el entonces candidato del PRI a la Presidencia, Luis Donaldo Colosio, y el secretario general de ese partido, José Francisco Ruiz, así como la crisis económica provocada por el “error de diciembre” (si la economía estaba sostenida con alfileres, ¿para qué se los quitaron?, preguntó el ex secretario Pedro Aspe), marcaron el rumbo de la sociedad mexicana contemporánea.

Lo anterior pudo apreciarse en el resultado de las presidenciales de 2000. A pesar de que el gobierno encabezado por Ernesto Zedillo entregó cuentas satisfactorias en términos de estabilidad económica, la población pasó la factura al antiguo régimen votando por la transición. Un hecho interesante ya que, mientras los gobiernos priístas que concluían en medio de escándalos políticos y financieros ganaban con relativa facilidad, la primera administración sin crisis sexenal severa debía entregar la banda presidencial a la oposición.

Sin embargo, las repercusiones de aquellos años prueba cero aún se perciben. De acuerdo a cifras oficiales, los empleos perdidos a raíz de los desajustes económicos todavía no se recuperan en su totalidad. Asimismo, la capacidad del Estado para garantizar la seguridad de sus habitantes ha sufrido un constante proceso de desgaste por los abiertos desafíos que ha recibido de organizaciones criminales. La sombra de la alteración entre sexenios no ha sido exorcizada del todo.

La conclusión de la administración Fox lo demuestra. Conforme ha avanzado 2006 el ambiente político ha tomado matices extraños. Las imágenes festivas de la noche del 2 de julio de 2000, en la que una multitud concentrada en la glorieta del Ángel de la Independencia arengaba al recién electo presidente mediante la repetición de la frase ¡no nos falles!, dista totalmente de las escenas que la televisión ha transmitido al término del mandato del mismo personaje.

Los autobuses, camiones y coches quemados en la capital de Oaxaca, las barricadas instaladas en sus calles, las fachadas semi destruidas de bancos y auditorios por los bombazos del 6 de noviembre en la Ciudad de México, entre otros acontecimientos, dan cuenta de que, en términos políticos, estamos instalados en una crisis de final de sexenio, la más fuerte desde 1988.

La consolidación de la democracia en el país ha resultado más complicada de lo que aparentaba ser. Diversos analistas consideraron al resultado de las elecciones de julio pasado como la evaluación definitiva para obtener el grado de demócratas. Ahora lo vemos más claro. No sólo se trata de transitar pacíficamente de una élite gobernante a otra, sino de comprender de qué va este asunto. Es decir, de no sólo andar pregonando que la democracia es la vía, la solución y la Tierra Prometida, sino de entenderla, asimilarla y sujetarse a sus implicaciones.

El viejo Bukowski solía afirmar que la diferencia entre una democracia y una dictadura radicaba en que, en la primera, podías votar antes de empezar a obedecer.

RAF

René Avilés Fabila tiene un blog y ya está incluido en la lista de Oficinas Alternas.

Una buena nueva.

Hugo

Bueno, pues no ha habido ninguna novedad respecto a la designación del nuevo técnico de la selección de fútbol de este país. Hugo Sánchez asumirá el cargo en los próximos días y, según lo que han informado los directivos de la Federación, tendrá contrato hasta el mundial de Sudáfrica, allá en el ahora lejano año 2010, el mismo que usamos los mexicas para celebrar ese uso y costumbre muy de lo nuestro y que consiste en madrearse unos contra otros cada 100 años.

La declinación de Gallego le dio un toque como de elección priísta de 1976 al asunto: ¿quién podía ganar cuando sólo había un candidato registrado?

Lo mejor es que, ahora sí, Hugo tendrá que demostrarnos para qué estuvo jodiendo tanto tiempo con que quería la selección y que tal y tal. Al fin veremos si es capaz de dar ese pequeño paso que nos falta para dejar de ser la eterna promesa de caballo negro en las competiciones mundiales.

En lo personal estoy de acuerdo con su designación: si no lo hace bien o si se echa a la prensa encima durante su estancia en el banquillo, el verdadero técnico que necesita el fútbol de este país llegará por ahí de 2008 o 2009, justo a tiempo para salvar el barco.

Posgrados

Han pasado cinco meses desde que obtuve el máster. La vida ha seguido tal cual. Bueno, ahora firmo como Mtro. o como MGAP. Pero, en general, la cosa fluye normalmente.

El sábado mi colega César me decía que quiere estudiar un MBA en alguna universidad norteamericana o en alguna nacional que tenga relación con aquéllas. Eso está muy bien. De acuerdo a la experiencia, aquellos que logran obtener ese grado se hacen acreedores a una especie de llaves que los llevan a puestos directivos en oficinas con vistas a las avenidas principales de las ciudades. Glamour, viajes y una cuenta bancaria que engorda a buen ritmo mientras las horas transcurren.

Unos días antes de mi examen, el Dr. J.J. Sánchez, uno de mis sinodales, me decía --más bien me exigía-- que renunciara ya a mi actual puesto porque, palabras más palabras menos, ya no corresponde a lo que un Maestro debe tener. De acuerdo. ¿Quién puede estar en contra de la evolución? El punto es que si lo que me pide fuese acequible con facilidad ya no estaría aquí desde hace tiempo y, sobre todo, no sólo por sus palabras, sino porque es algo que yo mismo me digo de vez en vez.

Entre la gente existe un mito muy común que cuestiona cursar posgrados frente a la utilidad pragmática de este hecho. La creencia de que muchos taxistas traen sus títulos de doctores en economía o en ingeniería nuclear debajo de sus tarjetones de circulación suele inhibir los deseos de algunos jóvenes por seguir en las aulas. Claro, la realidad también se encarga de poner de su parte en este tema. Al respecto, otro mito popular muy socorrido es el que señala que los estudiantes de seis y sietes en el pasado son los millonarios, mientras que los de nueves y dieces son los asalariados del presente es --lamentablemente-- cierto.

Veo mi CV y me digo, no se vería nada mal aquí un grado con el respaldo de alguna universidad extranjera. ¿Muchas pretenciones? Es posible. ¿Esnobismo? Quizás. Pero mientras se pueda intentarlo, ¿por qué no?

miércoles, noviembre 15, 2006

United!!

Con un buen tiempo de retraso, por fin he visto el filme Hooligans: Defiende a los Tuyos (Green Street Hooligans, GB-EU 2005). ¿Cómo no va a gustar si tiene los ingredientes que le gustan al respetable? Chelas, fútbol, Inglaterra, Londres, la clase media británica, violencia, es más, hasta la prestigiosa Harvard aparece por ahí. Sólo le faltaron algunas buenas súbditas de la Reina para amenizar la velada. Por lo demás, bastante bien.

Mucha gente calificó a esta película como una apología de la violencia, de las "firmas" (o barras, fans, ultras o como quieran llamarle) y de mostrar a este modo de vida como una fase superior de la camaradería y la lealtad. Puede ser. Yo me quedo con, por ejemplo, la herencia de la cultura británica en su población. Al respecto, las peleas que se dan en las calles de Londres recuerdan a las que sostuvieron romanos, vikingos, celtas y demás tribus antiguas en esos mismos territorios. Es decir, dos grupos frente a frente que se plantan y se buscan por el placer de madrearse, triunfar sobre el enemigo y ganar reputación. Otro punto de esa misma cultura es el de la cerveza. Algunos colegas que estudiaron en Cambridge y Warwick ya me lo habían comentado: no hay pueblo inglés, por pinche que sea, que no tenga un pub en el que la peña se reúna a beber chela --además, de las mejores chelas del planeta-- y a platicar, ver el fútbol o cualquier deporte en la pantalla y a escuchar en la máquina desde The Verve hasta Jamiroquai, pasando por los Beatles y los Stones.

Viendo la violencia que se llegan a bancar los ingleses no es raro comprender por qué les gusta encontrarse a los argentinos en las competiciones mundiales: porque son como que los únicos que les dan batalla. Ambas aficiones son entregadas y fervientes. Si a esto le sumamos cuestiones históricas como la batalla por las Faulklands, la mano de Maradona en el Azteca en 1986 y el gol de Owen en Francia 98, tenemos todo para un clásico mundial.

Buen filme.

I'm forever blowing bubbles
Pretty bubbles in the air
They fly so high
Nearly reach the sky
Then like my dreams they fade and die

Fortune's always hiding
I've looked everywhere
I'm forever blowing bubbles
Pretty bubbles in the air
United!! United!! United!!

martes, noviembre 14, 2006

iPod versus Zune


A reserva de probar al nuevo Zune, yo prefiero el iPod...

FC Sex D' Bur

Hemos descuidado uno de los temas que más le atraen a este blog: el fútbol, ya sea el nacional o de allende nuestras fronteras (como dicen los políticamente correctos comentaristas de la televisión local).

Por un lado, los que sólo tenemos cable nos hemos quedado con las ganas de ver los partidos de la liga española. Ahora sólo los dan por Sky. Así que, si es un sábado por la tarde normal y uno se acerca a los canales deportivos --Fox y ESPN-- sólo podrá ver algún encuentro del tipo Dallas Fire versus Columbus Patriots, o bien, al ya infaltable PSV contra algún equipo municipal holandés. Claro, también están los multicolores encuentros argentinos, narrados --pero por supuesto-- con ese toque cotorrón que sólo los pamperos les dan a sus partidos. Si uno sintoniza Fox Sports Argentina pensará que un Chacarita versus Nueva Chicago tiene casi casi el mismo nivel de dramatismo que esa final de la Champions disputada entre el FC Barcelona y el Chelsea.

Bueno, por otro lado está el asunto del buen paso de los nacionales por tierras sudacas. Tanto Pachuca como Toluca están a un tris de disputar la final de ese remedo de la Libertadores que se llama Sudamericana. A parte del nivel futbolístico, la diferencia entre ambos torneos es la marca patrocinadora (o espónsor, como le dicen por allá). Es bastante curioso cuando, por ejemplo, dice la voz presentadora: Copa Nissan Sudamericana presentada por... Nissan. Joder. Pues ni modo que por Toyota, ¿no? En fin.

Si alguno de los dos cuadros mexicanos que están compitiendo logra ganar la Copa, creo que tendríamos más argumentos para afirmar que se ha dado ese último e inconseguible paso que le falta al fútbol nacional para ser carne (como le pasa al pulque). Cruz Azul estuvo a un tris de lograrlo y Pumas, bueno, Pumas también. Ambos en La Bombonera y los dos frente al CABJ. Por lo tanto, por estas fechas estoy también con los tuzos y los diablos rojos en su aventura por el coño sur.

Por esta su casa que es el país que escribe su nombre con la equis, el fútbol doméstico se ha metamorfoseado en eso que se llama Liguilla: un torneo más corto en el que los dizque mejores de la competencia se enfrascan en una lucha de ida y vuelta para lograr el campeonato. Como esta fórmula ha garantizado harto dinero y harta emoción para los locales y, sobre todo, para la Federación, pues también se han inventado algo así como una serie de reclasificación --o repesca-- en la que, cuatro equipos no tan buenos, tienen que disputar entre ellos los últimos dos lugares disponibles para acceder a la "fiesta grande".

El asunto es que esto ya es, en sí mismo, como patético. Para demostrarlo, el ejemplo del Toluca: terminó cuarto general, está en semifinales de la Sudamericana y tiene que medirse ante Jaguares de Chiapas para estar entre los ocho mejores. Esto es una muestra fehaciente de que el sistema utilizado en México fomenta todo menos la justicia futbolera. Por debajo de los choriceros hay como cuatro equipos con menos puntos que pasaron directo a la fase final del campeonato. Tiene razón el Tolo al reírse frente a estas incoherencias.

Pumas cerró bien, pero eso no exenta que no recordemos los 16 partidos infames que nos dio hasta antes del domingo 12 de noviembre en el Olímpico Universitario. De hecho, pienso que después de la goliza que le metieron a los Tigres el Tuca les debió haber puesto una regañiza de tintes bíblicos a los muchachos porque se salieron de su esquema, ese que consiste en meter un gol, espantarse y echarse para atrás los 11 del grupo a defender ese mísero logro.

Dicen los comentaristas que Pumas puede ser el caballo negro de la competición. Nuestro corazón dice que ojalá, pero nuestra razón refuta diciendo que en el fútbol mexicano todos son espejismos: la única constante es que la mediocridad campea sin fijarse en estatus, colores, ciudades y tradiciones. Todos son malos. Un día el Guadalajara va y le gana a Vélez en su campo en un torneo internacional, y luego va a Veracruz Beach a perder por voltereta frente a los deudores escualos. Toluca está a un paso de llegar a una final importante y el Monterrey le mete dos en el Tecnológico. Necaxa, el equipo de donde saldrá el próximo técnico nacional, ni siquiera ha calificado a la ronda final. Cruz Azul, el equipo que sumó no sé cuántos partidos sin ganar, resulta que al final del torneo es el líder general. San Luis, a un pasito, segundos, de irse a la Segunda, fue el finalista --y por un pelín casi campeón-- de la Liga Mexica pasada (o Liga de las Américas, como la llama sangrona y pretenciosamente el Récord). ¿Entonces?

Para rematar diré que siempre es bueno tener fútbol en las pantallas de nuestros televisores porque se presta para el solaz, la tomadera y la relajación. Ya mañana llegaremos temprano para ver a los chicos del (Pi)Ojitos Meza por tierras brasileñas y el jueves para observar a los de Gallego en aquel estadio que algún día sirvió de campo de concentración para el régimen de Pinochet.

Mientras tanto, conformémonos con el tema de hoy: ¿dónde tomará posesión Felipe de Jesús Calderón el próximo 1 de diciembre?

Hagan sus apuestas en Kinielón...

Y vio el burócrata que era bueno.

lunes, noviembre 13, 2006

Mio Cid

Bueno, todos saben, lo leímos a fuerza en la secundaria, que se trata de mi señor y que dio origen a infinidad de historias de aventuras caballerescas, como las que terminaron de enloquecer a Don Quijote para empezar sus andanzas.

De esas historias, incluída la del Quijote mismo, lo más triste era el viaje de retorno. El regreso a casa ha sido de lo más penoso desde la Odisea de Homero hasta el Ulises de Joice; ese punto de quiebre resulta fatigoso, aún más que las hazañas pasadas.

Guardando toda proporción me siento bastante afín a esas historias, pero me sumo más como el hidalgo caído en desgracia y empobrecido que cualquier otra cosa, me explico:

Ya he contado por este medio algo de mis ocupaciones, debo explicar que desde un principio esta ocupación de abogado la he visto más como una forma de interpretar un personaje, digamos que el derecho es un trasfondo que me acompaña a todas partes. A últimas fechas me he desviado a un área bastante competida, la del derecho electoral, que proporciona un aurea de glamour a la actividad generalmente oscura de los abogados. Ahora que he concluido dos grandes proyectos me siento como sobreviviente de dos naufragios.

Es decir, entras en la defensa de tal o cual candidato, asumes desde un principio que estas con el bueno, que no puedes fallar, no me imaginaría el escenario diciéndole al cliente: sabe, perdimos, pero en seis años no volvemos a fallar.

Tambien se trata de defendidos dispuestos a todo, digamos que colitigas, que hay que hacer el trabajo jurídico, pero tambien tienen que ayudarte, si por ejemplo el candidato pierde por una diferencia de 250 mil votos, por muy medio punbto porcentual que signifique, en realidad estas fuera de toda contienda.

Tal vez en una ocasión entre en detalles, pero ahora en resúmen sólo quisiera resaltar lo agotado que me encuentro, dicen que esta materia es como una adicción, ahora estoy en mi casa, disfrutando a la familia, voy a las reuniones escolares, al super, con los niños de paseo, pero siento que me hace falta el fragor de la batalla, las angustias y los dias sin dormir. Digamos que efectivamente la vida fluye, como la metáfora de la paleta de hielo. Pero hay formas en que fluya mejor que ahora. Otro factor puede ser el que en este momento no este ganando dinero, no soy el mejor administrador y auque tengo reservas siento que en cualquier momento se me acabará la lana para enfrentar las responsabilidades cotidianas. En estos momentos me pregunto, como le hacia Penelopé para seguir hilando y deshilando.

Avándaro versión 2.0

Hoy por la mañana escuché en Reactor 105 --a veces uno se cansa de tanta Aristegui-- que el próximo fin de semana harán la segunda versión de Avándaro, el mítico festival de Rock y Ruedas llevado a cabo en septiembre de 1971 en aquella población del Estado de México. De acuerdo con la publicidad, el concierto se realizará a un costado de La Marquesa y actuarán varios grupos de rock mexicano durante tres días como parte de las celebraciones de los 50 años de este género en el país.

Pues si en verdad se va a montar un Avándaro II, creo que la promoción ha sido deficiente. En mi opinión, era para que ya estuviera en todos los diarios y para que existiese un rumor generalizado de que el festival más importante de rock en México tendrá una nueva versión.

¿Quiénes irán ahora? ¿Puros chavos banda o los seguidores del ska o los punks o la vieja guardia? ¿O todos juntos? ¿Habrá duetos del tipo Javier Bátiz con Panda? ¿Volverá a tocar El Tri? ¿Quién será la nueva encuerada de Avándaro?

Recordemos que los intentos por revivir Avándaro no han sido del todo atinados: justo cuando iba a cumplir 30 años por todo lo alto, a unos musulmanes radicales se les ocurrió estrellar dos aviones en las Torres Gemelas de la Gran Manzana.

Lamentable Presidencia

Rogelio Hernández Rodríguez

El ambiente político cada día se complica más no sólo porque aparecen nuevos conflictos y los viejos se agravan, sino porque los participantes demuestran una notable falta de responsabilidad y capacidad para encontrar puntos de acuerdo y establecer mecanismos que atiendan el malestar social. Oaxaca continúa sumida en el desorden y todos los políticos involucrados, lo mismo en la entidad como en el gobierno federal, siguen recriminándose unos a otros pero sin que ninguno demuestre verdadero interés en solucionarlo. Por si fuera poco, al encono que se advierte entre las partes se han sumado algunos grupos guerrilleros que muy al margen de sus motivaciones, han decidido contribuir con lo que mejor saben hacer: provocar más incertidumbre.

La lógica política indica que toda negociación supone puntos intermedios de acuerdo en los que cada parte obtiene algo de sus originales pretensiones; nunca el todo porque conseguirlo significaría el sometimiento del adversario. En todos los casos que tienen al país en medio de la crisis, ninguno de los participantes está dispuesto a ceder porque han advertido claramente que no hay ninguna autoridad capaz de imponer los límites y alcances de sus demandas. Si algo está presente en la mente de todos, políticos y sociedad, es que no hay órgano central que establezca una guía de comportamiento.

Ese órgano tendría que ser el Presidente de la República. Sin embargo, como es fácil advertir en las últimas semanas, el Presidente parece estar más preocupado por pasar sus últimos días defendiendo su gobierno, de nueva cuenta a su esposa, criticando a la oposición que nunca lo ha entendido y viajando, incluso para asuntos personales con cargo al erario, que en atender los problemas que su negligencia ha dejado crecer. Tan preocupado se encuentra por estas tareas, que la negativa del Congreso a salir del país le ha molestado de tal manera que ha recurrido a los medios de comunicación para acusar a los legisladores de no entender las altas miras de sus viajes particulares, y ha aprovechado cuanto foro se le presenta para volver a acusar al Congreso y los partidos de obstaculizar su gobierno. Fox termina su sexenio del mismo modo como lo comenzara: en abierta confrontación con el Congreso.

La negligencia presidencial es ostensible. Después de semanas de constantes críticas a su pasividad en Oaxaca y sólo hasta que un periodista estadounidense fue asesinado y provocó las protestas de ese gobierno, el mandatario se decidió a enviar a la policía a esa entidad. Pero como ha quedado claro a partir del segundo día de su llegada, el único propósito era rescatar el centro de la ciudad de Oaxaca y no terminar con el problema central. El zócalo oaxaqueño podrá estar libre de manifestantes pero el estado sigue en las mismas condiciones de inestabilidad porque la intransigencia de la APPO y del gobernador se mantiene intacta.

El Presidente parece tener una forma, singular y sobre todo personal, de entender la realidad. No sólo le parece que ya está restablecida la paz en Oaxaca sino que las bombas colocadas la semana pasada y cuyos autores son grupos guerrilleros, no representan ningún riesgo para el país. Porque a su juicio todo el país se encuentra en calma y las instituciones funcionando eficazmente, es que el Presidente no consideró necesario cancelar sus viajes, uno oficial a Vietnam y otro personal a Australia.

Desde luego que la negativa del Congreso tiene una buena dosis de revancha, pero sería poco serio no ver en la actitud presidencial una falta de responsabilidad al abandonar el país durante 20 días y en medio de problemas políticos graves, para un viaje oficial pero no imprescindible, y otro en el que no es difícil advertir que lo más importante era visitar a un familiar. Por más revanchista que sea la actitud de los partidos de oposición, no deja de ser un llamado de atención al Presidente para que asuma su papel en la solución de los problemas nacionales.

Sin una cabeza visible y en especial respetada, no se esperaría que el resto de actores políticos se conduzca con responsabilidad. Después de las elecciones ha sido reiteradamente subrayada la polarización política y la fragmentación de los partidos que hace difícil alcanzar acuerdos. En esas condiciones, un Presidente propenso a la descalificación de sus adversarios, a la crítica fácil y a imponer sus puntos de vista, no contribuye a las negociaciones. En un calendario político como el mexicano, en el que median unos días para que el nuevo mandatario asuma el poder y por ende sea el responsable de la política, el saliente no puede mantenerse al margen. Fox es hasta el último día de noviembre el encargado del Ejecutivo y por eso no puede evadir la solución de los problemas.

Es verdad que el presidente Fox no ha creado todos los problemas, pero ha contribuido al agravamiento de muchos por sus declaraciones imprudentes y porque las más de las veces ha asumido el papel de contrincante, dispuesto siempre a la confrontación, en especial cuando es criticado su comportamiento. Tampoco ha sido infrecuente que destine más tiempo a viajar por el extranjero, con muy pocos resultados favorables para el país y en ocasiones donde no se justifica oficialmente su ausencia. Este rechazo no ha sido el primero, pero tampoco es la primera vez que priva la sospecha de que no había razones suficientes para aprobar el viaje.

Lo grave es que esta actitud del presidente Fox no es nueva. A lo largo de su administración el jefe del Ejecutivo ha dado sobradas muestras de que nunca entendió a cabalidad la magnitud de su mandato. Construyó un gobierno en el que dejó que poderes de facto se afianzaran y renunció a emplear su autoridad, legal y legítimamente conseguida en las urnas, para consolidar el cambio que él encabezó. Su idea de que la democracia significa mantenerse como observador de los conflictos y que lo mejor es dejar que los actores políticos, ya sean partidos, grupos o líderes, se regulen a sí mismos, solamente ha conducido a profundizar el encono y a dificultar las soluciones.

Fox será recordado por haber logrado la hazaña de terminar con el largo dominio del PRI e inaugurar con ello la democracia. Pero también por ser un mandatario que no pudo construir una Presidencia respetada, que vivió envuelto en escándalos y sumido en la incompetencia política. Felipe Calderón tendrá que hacer frente a múltiples y variados problemas, pero no podrá ni siquiera comenzar a tratarlos si no restaura antes la autoridad y el poder de la Presidencia que ha sido tan dañada por su antecesor.


Investigador de El Colegio de México

Joe Jagger

Fallece el padre de Mick Jagger a los 93 años

Londres. (EFE).- Joe Jagger, el padre del cantante de los Rolling Stones, Mick Jagger, murió hoy en un hospital de las afueras de Londres a los 93 años, informó un portavoz del músico a la agencia británica Press Association (PA). Joe Jagger falleció en un hospital de Kingston, en el condado de Surrey, donde ingresó hace ocho días tras sufrir una caída en su casa que le produjo la fractura de dos costillas y daños en un pulmón.

El padre del vocalista de los Rolling era un profesor de Educación Física muy popular en el Reino Unido e introdujo el baloncesto en un país volcado en otros deportes como el fútbol o el cricket.

Mick Jagger, de 63 años, suspendió el pasado fin de semana la gira que realizaba por Estados Unidos con los Rolling Stones para viajar a Londres a ver a su padre junto a su único hermano, Chris, de 57 años. Según la prensa británica, la ex esposa del cantante, la modelo Jerry Hall, también acudió al hospital a ver al que fue su suegro.

La gira de los Rolling, 'A bigger bang', se suspendió unos días hasta la vuelta de Mick, que regresó a EE.UU. y esta misma noche tenía programado un concierto en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas.

La madre de Jagger, Eva Scutt, de nacionalidad australiana, falleció el 18 de mayo de 2000 en un hospital londinense, de una dolencia cardiaca, a los 87 años. En aquella ocasión, Mick Jagger cantó junto a su hermano Chris una emotiva canción en el funeral por su madre, el tema evangélico 'Will the circle be unbroken' ('El círculo no se romperá').

Una de las últimas apariciones públicas de Mick Jagger con su padre se produjo el 12 de diciembre de 2003 cuando el vocalista de los Rolling fue declarado Caballero del Imperio Británico en una solemne ceremonia presidida por el príncipe Carlos de Inglaterra. Joe Jagger, que contaba entonces con 90 años, lució un excelente estado físico durante el acto, al que acudieron también dos de las hijas del cantante.

El padre de Jagger nunca pudo sospechar que su rebelde hijo, que se negó a continuar sus estudios en la prestigiosa London School of Economics y optó por el rock, llegaría a ser Sir y a recibir el título, de rodillas, de manos del heredero de la Corona británica.

viernes, noviembre 10, 2006

Más Moleskines

He estado consultando varios sitios, españoles la mayoría, en donde diversas personas se enfrascan en debates respecto a sus libretas Moleskine. Hay algunas bastante lúcidas y otras críticas. De lo que he leído saco algunas conclusiones.

a) La empresa que la ha vuelto a sacar a la venta, Modo & Modo (Italia), ha hecho un gran trabajo de mercadotecnia al remarcar en todo momento que esta libreta es "la que han utilizado los más grandes artistas europeos".

b) De esta forma, existe una creencia o ilusión velada de que, si adquieres una Moleskine, lo que ahí escribas puede ser la semilla de una gran novela, la quintaescencia de un cuento o la carta de navegación del próximo ensayo.

c) La Moleskine es un objeto codiciado y valorado en Europa y Estados Unidos. Su impacto en México aún está pendiente.

d) Los españoles que tratan el tema suelen intercambiar direcciones de tiendas o librerías en las que pueden comprarse las Moleskines, o bien, páginas de Internet en las que pueden hacer encargos vía mensajería. En el país ya están disponibles en las librerías del FCE, aunque no sé exactamente desde cuándo (yo llegué a la libreta por azar).

e) Un tipo pregunta, ¿hay algo más pijo (fresa)? A lo que otro responde, "sibarita es la palabra".

f) La fuerza de la publicidad se acompaña de referencias literarias y cinematográficas sobre el objeto. Ahí está, por ejemplo, la francesa Amelié anotando en su Moleskine las buenas obras que realiza durante el día y, claro, también el intrépido Indiana Jones consultando su libreta de tapas negras durante sus recorridos. Ya ni qué decir sobre la imagen de Hemingway escribiendo sobre su ejemplar en algún café de París.

g) Ergo, no es difícil imaginar los cafés de la Condesa con gente garabateando en su Piel de Topo.

h) Como la Moleskine es cara, resulta más atractiva. Existe un tipo de fascinación por los objetos que no son acequibles de manera fácil. Tener esta libreta significa estar del otro lado, aunque en ello te vayan 10 dólares, 10 euros o 164 pesos. Como dice mi colega Brenda, a la gente nos gusta que nos cobren caro.

i) La Moleskine forma parte de la indumentaria geek, la cual es, a saber, una portátil, un iPod y/o una Palm. En otra fase podemos incluir también a los artículos de escritura no convencionales como las estilográficas, los rollers y los bolígrafos de diseño.

j) Algo muy común entre la gente que siente fascinación por la Moleskine es que, una vez adquirida, no escriben en ella. En efecto. De hecho, algo parecido me ha sucedido a mí. La codicias, la buscas, la tienes. ¿Y luego? Nada, no quieres profanarla. Así que, la libreta está ahí, guardada e intacta, haciendo las veces no de medio o artículo, sino de fin.

k) Ante este fenómeno, la recomendación de los moleskiners es que, una vez comprada, se le pierda el respeto de inmediato, es decir que se comience a garabatear, a rayar y a maltratar a la libreta. De lo contrario, la inmovilidad se apoderará de todo y, lo peor, es que no habrá cuenta regresiva para comprar otra después.

l) La Moleskine es un artículo bastante útil y llamativo. Pero, sobre todo, es un fetiche.

jueves, noviembre 09, 2006

Burócrata sí come burócrata

Esta mañana he ido a la Clínica de Especialidades Churubusco del ISSSTE. Todo bien. Llegué muy temprano a la zona donde se agendan las citas y sólo había una señora en el mostrador y dos más en los bancos, así que pasé a ventanilla casi de inmediato.

El problema surgió ahí. El área a la cual tengo que ser canalizado es oftalmología. "Es una de las más saturadas", me dijo la muchachita sentada frente al ordenador. Y, en efecto, se nota que la lista de espera es larga, larga. Mi cita me la han dado para, escuchen bien, el 7 de mayo de 2007.

¡Jo! Es decir, dentro de seis meses. Para esas fecha quién sabe si necesite atención médica, si siga siendo burócrata o, de plano, si exista el país. Sólo pude preguntar ¿no tienes algo más cercano?, a lo que la tipa contestó simple y sencillamente no. Tranquilo, pero herido, terminé el trámite y salí a caminar sobre Tlalpan. Una víctima más de la burocracia.

Que alguien me recuerde el 6 de mayo de 2007 que tengo cita al día siguiente, por favor.

miércoles, noviembre 08, 2006

El problema no es que "el mundo de la literatura" esté lleno de escritores frustrados. El verdadero problema es que fuera de ese mundo aún hay más.

H. Yépez.

El gran final

Fox no deja de sorprenderme. Cuando uno creería que todo estaba dicho por parte de este guanajuatense, viene algo todavía peor en una especie de fase superior del humor involuntario.

La lista de frases nunca se acaba, como diría el gran Mike Laure. Pero la de hoy sí es digna de cerrar con broche de oro el sexenio. Aunque, como he dicho, uno nunca sabe cuándo decir hasta aquí se acabó todo, ya que la capacidad de reinvención del aún presidente es inagotable.

Mientras tanto, hagamos de cuenta que hoy concluyó la administración 2000-2006 y que, para decir adiós, aparece este mensaje en la pantalla:




A todos los que vieren y entendieren, sabed.

La libreta Moleskine

Tengo un portátil. Es un Dell con el que estoy muy contenta y que uso muy a menudo. Desde hace un par de días, y por 10 dólares, hice una compra que se ha convertido en mi segundo portátil: una libreta Moleskine.

No sé si mis fieles lectores pueden entender esto, pero las libretas y yo tenemos una relación platónica de muchos años; me chiflan las libretas nuevas, sin estrenar, y lo que más me gusta en el mundo es un libro bien encuadernado con las páginas en blanco. Siempre llevo una liberta o dos en mi mochila. Cuando quiero un capricho, más de una vez ha caído un libro en blanco bien encuadernado con una portada bonita.

Pero todos plantean un problema u otro para ser perfectamente prácticos: demasiado grandes, demasiado gruesos, tienen páginas satinadas sobre las que resbala la tinta de la pluma, la encuadernación no es buena o no deja escribir a gusto, se abren dentro de la mochila y se les arrugan las páginas...

Y entonces vi la libreta esa, me la compré en un impulso, y raras veces me he arrepentido menos de una compra, 10 dólares o no. Tiene el tamaño perfecto, el peso perfecto, una goma para mantenerla cerrada (y enganchar el clip de la pluma), un bolsillo interno para guardar papelitos sueltos, una cintita para marcar la página, espacio para ex libris, páginas cuadriculadas, y encuadernación perfecta: resistente, de calidad, y se mantiene abierta por sus propios medios. Y lo mejor de todo: no hace alardes de diseño más o menos afortunados como el 99% de las libretas y libros en blanco de aquí. Es negra y punto.

La llevo usando estos últimos días para tomar todo tipo de notas y va perfecta; me cabe en el bolsillo, cuando la llevo en la mochila no acaba pareciendo un acordeón, y si la tinta de la pluma traspasa un poquito, es sólo culpa mía por gustarme las estilográficas y la tinta realmente opaca.

Es, en el mejor sentido de la palabra, mi otro portátil. Y se lleva muy bien con mi Dell.

martes, noviembre 07, 2006

Empecé a escribir porque me gustaba escribir. Fue, en primer lugar, un amor hacia los instrumentos que se utilizan para escribir: el papel, la pluma, los lápices, la tinta. Aún hoy en día, cuando entro en una papelería, siento una especie de euforia que creo se parece a la de un bebedor en un bar. Era un amor tan sensual hacia aquellos instrumentos, que recuerdo incluso el sabor de la tinta que el bedel vertía en los tinteros clavados en los bancos. Tal vez me bebía la tinta... ¡Y qué cosa maravillosa era escribir! Ver una cosa, tener un pensamiento, y ponerla por escrito, plasmarlo con la escritura.

Leonardo Sciascia


--oo00oo--


Cuando escribo a mano, escribo con pluma estilográfica; manías que tiene una. Empecé con una Waterman que me regaló mi padre; era una pluma sencilla, de color plateado mate, sin adornos. Una pluma de batalla para llevar a todas partes. Me costó hacerme con ella, pero cuando, como se suele decir, "rompí la mano", se quedó rota, y no usé otra cosa durante todo el Instituto y la carrera. Yo iba a todas partes con mi pluma Waterman plateada, cargada con tinta azul-negro (primero) o azul (más tarde), y un reservorio de kleenex porque hacia el final de su vida útil a la pobre le daba por destintarse dentro de la mochila y lo ponía todo perdido. Como no tenía cargador rellenable, usaba una pequeña jeringa para rellenar los cartuchitos de plástico con tinta de tintero. En fin, que monté toda una parafernalia que mis compañeros de carrera, más prácticos pero también más anodinos, se ahorraban.

Pero a mí me encantaba; me aficioné al ruidito del rascar del plumín sobre el papel (yo compraba unos bloques Multifin de dieciséis agujeros, cuadriculados, un papel grueso casi como cartulina que iba de maravilla), me aficioné a la suavidad de trazo y al delicado control del grosor de la línea con el que podías jugar por si había que tomar una nota al margen o hacer un esquemita. Encontré el punto exacto de aquella pluma; casi se puede decir que saltaba a mi mano como un perrito bien adiestrado, y el plumín se ponía automáticamente en el ángulo exacto para mí. Éramos una sola entidad.

Finalmente la Waterman murió de vieja. El plumín se desprendió del cálamo, que ya estaba muy desgastado, y ningún arreglito ni chapuza de los que había aprendido a hacer me sirvió para que aquello dejara de desencuadernarse a las dos palabras. La llevé a arreglar a una tienda deliciosa que hay en Valencia, La Central del Fumador, donde voy a babear de vez en cuando frente a los escaparates para hacerme mala sangre por todas las plumas que no me puedo llevar. Allí me dijeron que la única solución era cambiarlo todo, cálamo y plumín, y dije que bueno. Casi me costó lo mismo que le debió costar la pluma a mi padre, pero eran demasiados años juntas como para tirarla simplemente a la basura como un trasto inútil. Me la devolvieron pulcramente envuelta en un sudario de papel de seda, con las partes dañadas en un paquetito aparte. Pero aquella ya no era mi pluma. Lo intenté; durante dos o tres semanas me forcé a escribir con ella, pero algo no funcionaba entre las dos. El trazo era duro, cosa de esperar, y como espasmódico. Pensé que tenía que "hacerla a mí" de nuevo, pero no hubo manera. Algo se había roto: mi Waterman, aquella con la que compartí nueve años de apuntes, ya no era esta extraña que se sentía tiesa y rebelde en mi mano. La letra salía rara, contrahecha. Ninguna tinta parecía fluir bien por su perfecto plumín nuevo.Ningún color me satisfacía. Acabé arrinconándola en un cajón.

Tengo más plumas, y durante meses enteros jugueteé ya con una, ya con otra, buscando aquella que me sirviera, no sólo para algunas cuartillas o notas apresuradas o ese cuento que sabes que vas a escribir de un tirón, sino para llevar conmigo a todas partes hasta que el destinte nos separe. En vano. Eran todas plumas honestas, de buena familia, como aquella delicada Parker con adornos de oro y plumín en forma de flecha, de cuerpo demasiado esbelto pero trazo elegantísimo y suave, o la Montblanc, la reina de mi colección, que todavía tiene que encontrar su tinta ideal y cuyo carácter es algo indeciso y sin aristas, demasiado suave para mí. También había una Sailor de metacrilato transparente y punto finísimo, a la que puse tinta azul eléctrico, que trazaba líneas delicadas como hilos de araña y era linda como una heredera de plantación sureña, pero tendía a desmayarse si le pedía velocidad, perdía el trazo y arañaba el papel con furia pero sin dejar rastro.

En resumen: creí que mis días de estilográfica habían terminado y que tendría que pasarme a los bolis de tinta en gel, que ahora son de muchos y hermosos colores. Hasta que alguien me habló de la Waterman Phileas. Por razones algo largas y complicadas de explicar ahora mismo, me compré una.

Es una pluma de diseño muy clásico, con el cuerpo negro o de colorines con efecto mármol, y sobrios adornos art decó en oro. Tiene el cuerpo ligeramente rechoncho, amigable, y un hermoso plumín de oro y acero con filigranas que le da un aire muy noblote y un poco serio. Al principio me pareció un poco incómoda; acostumbrada a la esbelta línea argéntea de mi Waterman, la Phileas, aunque ligera, encajaba entre los dedos de manera un poco incómoda, un poco a contrapié. Pero apenas tras una semana de escribir con ella, supe que había encontrado la nueva pluma con la que compartir alegrías y pesares. La Phileas es una pluma para todos; no os dejéis engañar por su exterior de Vicepresidente. Al igual que el indomable viajero de la novela de Verne, Phileas Fogg, esta pluma puede ir a donde sea y hacer lo que sea necesario, sin quitarse la chaqueta ni perder su elegante atuendo azabache y oro. Tiene el trazo fácil, limpio y sin estridencias, extraordinariamente cómodo, y la presa es suave y se amolda a tu ritmo de escritura, sin pedirte más o menos velocidad. Me encariñé de inmediato con ella y ahora me sigue a todas partes. Estos últimos días he estado a punto de perderla dos veces y creo que el cuasidisgusto me ha quitado lo menos un mes de vida.

Moleskine y Phileas negra: una combinación de las que harán historia. Y si no, al tiempo.

http://daurmith.blogalia.com/historias/3797#comentarios


lunes, noviembre 06, 2006

Moleskines

Yendo de un blog a otro en esta tarde de otoño del Año del Señor 2006, me he encontrado con uno de un tío culturoso que, a su vez, hace mención a otro culturoso de peor calaña. Si hubiese algún tipo de grados de la culturosidad nacional, el segundo en cuestión estaría por ahí del I o del II, mientras que el primero apenas estaría en la fase de ingreso, en una especie de homenaje involuntario a lo que sucede en el Sistema Nacional de Investigadores.

Bueno, pues el punto es que el muchacho que escribe el segundo blog --joven escritor joven promesa joven de provincia y joven todo-- no ganó una beca del Conaculta en su última edición (siempre me han llamado la atención los escritores, artistas, performanceros, teatreros y demás fauna que reniega del Estado, pero que ahí andan mendingándole los apoyos y los auspicios a la menor provocación). Y, vaya, pues ante este escenario inesperado (según ya ha publicado dos novelas y ha aparecido en recopilaciones de la "nueva narrativa" mexica), para no quedar peor y disimular un poco el escarnio público, pues que se lanza a trabajar a una mina del norte del país.

Así es. Según lo poco que he podido ver por estos momentos anda bajo tierra trabajando como los verdaderos hombres y no escribiendo cosillas desde la comodidad de un escritorio o de un café con conexión inalámbrica a la red. De acuerdo con sus crónicas, después de recoger el fruto de la madre tierra en forma de hollín, carbón o qué se yo, pues saca su Moleskine y se pone a garabatear lo que más adelante el maldito Conaculta se arrepentirá una y mil veces de haber despreciado.

Joder.

Su Moleskine.

En efecto, el chaval escribe en una Moleskine. Y además lo menciona a cada rato. No hay post en el que no saque algo de su Moleskine: que su Moleskine esto, que su Moleskine lo otro, que su Moleskine tiene cada vez menos hojas limpias, que su Moleskine genera molestia entre sus compañeros, que su Moleskine tal por cual, que bla, bla, bla...

Al leer todas estas heces me sentí un poco mal. Como recordarán, hace poco puse en este mismo espacio que me había comprado una libreta en el FCE y que después descubrí que era la tal Moleskine, la misma que usaron en su época Hemingway, Chatwin y Van Gogh (claro, esto último remarcado con insistencia por la publicidad de la empresa italiana Modo & Modo con el fin de generar en el mercado esa creencia de que cualquiera que tenga una Moleskine escribirá como el viejo Ernest o pintará como el desorejado). Uta. Me sentí más snob de lo que de por sí soy.

Ni pex. Primero me acabaré la JNF que me trajo mi mujer de París y luego ya veremos qué hacemos con la mentada Moleskine.

Aunque lo más seguro es que imitaré al irlandés Kilroe que se compraba en el subterráneo sus libretas de cinco pesos: las mismas que dicen Amor es compartir con dos perritos abrazados y cobijados por un corazón.

Máxima

La vida es como una paleta de hielo: chupes o no chupes se acaba.

César Rojano

domingo, noviembre 05, 2006

Lecciones de Oaxaca

En los últimos días mucho se ha escrito respecto al caso de Oaxaca. Los analistas han presentado sus argumentos para identificar cómo, cuándo y por qué una exigencia estrictamente magisterial se ha convertido en un movimiento social que amenaza con desbordar su lugar de origen. De igual forma, han expuesto los probables escenarios bajo los cuales el conflicto se resolverá o, al menos, amainará en intensidad en los próximos días y meses. En cualquier caso, el tema nos arroja ya algunas lecciones a considerar.

Una de las más importantes es el hecho de que los problemas sociales no se resuelven por sí mismos. Esta es una verdad de Perogrullo, claro, pero es conveniente repetirla ante la actitud asumida por las autoridades involucradas, en especial las federales. Bajo un concepto mal entendido de federalismo, la estrategia asumida por los funcionarios encargados de conducir la política interior del país fue la de dejar pasar los días con la esperanza de que, poco a poco, las cosas se fueran calmando y las aguas volvieran a su nivel por inercia.

Por supuesto, no sucedió ni una cosa ni la otra. Al contrario, la escalada del conflicto ha sido lineal hasta el punto en el que el propio Vicente Fox ha reconocido que el asunto “está duro” y que lo heredará al próximo presidente. Algo totalmente opuesto a sus anteriores declaraciones en el sentido de que Oaxaca se había resuelto de la misma manera que Atenco y Chiapas. Esto causó no sólo sorpresa sino desprecio por parte de la población en general. ¿Están resueltos Chiapas y Atenco efectivamente? Y en el remoto caso de que así fuera, ¿se solucionaron por el “diálogo” encabezado por la administración actual?

Otra lección consiste en cuestionar la creencia de que la democracia ha sentado sus reales de manera sólida en el país. Quizás a nivel federal exista alguna percepción más tangible respecto a este sistema político, a las raíces que ha echado en nuestro contexto y a los beneficios que son atribuibles al mismo. Sin embargo, en algunas regiones lo que tenemos es exactamente lo opuesto. Tanto en los estados como en los municipios permanecen prácticas de cacicazgos, tan añejas como nuestra propia historia, que poco a nada tienen que ver con ese ideal que se inauguró en el año 2000 y que tantas expectativas ha generado a partir de entonces.

El punto preocupante es que esta peculiar cultura política antidemocrática no es exclusiva de la clase política de estas zonas. No. La propia sociedad civil reproduce las formas a las cuales dice combatir. Los esquemas utilizados por los grupos opositores para organizarse y tomar decisiones no distan mucho de esas figuras autoritarias y verticales que enfrentan. Al calor de la batalla las opiniones moderadas no tienen lugar, por lo que sólo las posiciones radicales son las que satisfacen los ánimos de la masa.

Si hacemos caso a esa máxima que afirma que la democracia se nutre de demócratas y que la mejor escuela de demócratas es la propia democracia, el caso de Oaxaca nos demuestra que hay un México real en el que estas ideas no trascienden aún la categoría de exóticas y utópicas.

Esto nos conduce a una tercera reflexión: ante la disyuntiva de arraigar la democracia o de resolver los rezagos ancestrales que han dado lugar a la inconformidad social, ¿qué es más importante?, ¿el progreso económico o las reformas políticas?

Lo anterior sale a colación frente al dilema de hacer de Oaxaca –uno de los tres estados más pobres del país—una entidad próspera y justa, o bien, de promover nuevos arreglos políticos internos que den cauces renovados a la inconformidad.

En nuestro vecino del sur se han juntado el hambre con la necesidad. Una población pobre, una clase política autoritaria y viejas prácticas violentas en ambas. El punto es que ellos no son los únicos que reúnen estos ingredientes necesarios para generar un cóctel social explosivo. De hecho, una de las preocupaciones más fuertes respecto al conflicto (la destitución de Ruiz como un ejemplo y aliciente para otras latitudes) da fe de la existencia de otras sociedades que podrían responder de la misma manera que Oaxaca en el corto plazo.

Por último, una reflexión respecto al ejercicio de la política. Es decepcionante escuchar expresiones como las realizadas por Fox en el sentido de que su gobierno “ya cerró la cortina” y de que lo que más desea es irse al rancho a “abrazar al Vicente III”. Si el líder de la administración pública federal da ese mensaje, ¿qué podemos esperar de su desempeño?

La aventura emprendida desde diciembre de 2000 a la fecha ha sido al mismo tiempo una esperanza y una aberración.

Post puente

Regresando del mega puente con el documental de los Stones en Río de Janeiro en el National Geographic Channel...